Una guía penitenciaria fue asesinada la tarde de este miércoles 19 de noviembre de 2025 cerca del sector del basurero, en la zona de moteles del norte de Esmeraldas. Según versiones preliminares, sujetos armados le dispararon en múltiples ocasiones, acabando con su vida en el sitio. En medio del caos, los gritos de su madre resonaban: “Hija, levántate, mi amor, levántate”.

La víctima fue identificada como Katty Villarreal. Las autoridades no han ofrecido una versión definitiva de cómo ocurrieron los hechos. Se sabe únicamente que fue blanco de un ataque directo mientras viajaba en su motocicleta, lo que eleva las sospechas de una acción planificada en un contexto de violencia estructural.

Este asesinato no es un hecho aislado, sino parte de una escalada preocupante en Ecuador: en 2025, más de 10 funcionarios penitenciarios han sido asesinados, según reportes de medios locales.

Una profesión expuesta

El sistema penitenciario ecuatoriano se encuentra profundamente tensionado. De acuerdo con información del SNAI, actualmente hay 2.835 guías penitenciarios encargados de custodiar a más de 34 mil reos en el país.

Según la Asociación de Servidores Penitenciarios, desde 2024, el número de guías asesinados asciende a 30; sin embargo, la Policía reporta 17 funcionarios del SNAI acribillados en el mismo periodo, 10 de ellos en Manabí, seguido de Guayaquil, Machala y Quito.

Uno de los hechos más graves ocurrió el 7 de abril de 2025, cuando tres guías penitenciarios (identificados como Gabriel Calle, Johan Simbaña y Richard Benenaula) fueron emboscados y asesinados a balazos mientras se dirigían a la cárcel de El Rodeo, en Manabí.

Este episodio llega en un momento delicado. En días recientes, una masacre en la cárcel de Esmeraldas dejó 17 presos muertos y varios heridos, lo que evidencia que el sistema penitenciario se ha convertido en un epicentro de violencia.

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