Si hablamos de tentaciones y pecaditos culinarios, el presentador y deportista David Naula tiene uno: el queso. Se declara amante de las papas fritas y de la pizza bañadas en ese producto, aunque confiesa que los come sin cargo de conciencia, pues hace full ejercicios.

“No tengo dieta estricta, pero como sano. Mi esposa Mayra Jaime (actriz y presentadora de TV) es la que hace mi alimentación rica en fibra y alta en proteína. Mi pecado es la pizza y todo lo que tenga queso. La cola no me gusta”, revela Naula.

Otra cosa que no deja, pese a ser fit, es pegarse sus cervezas entre panas, aunque todo es controlado.

“No farreo porque tengo dos hijos y no puedo gastarme la plata. Tengo dos bocas que alimentar”, añade.

Su rutina comienza de lunes a viernes a las 06:00 y aunque su especialidad es el entrenamiento funcional (ejercicios que se adaptan a los movimientos naturales del cuerpo) no descuida el gimnasio. Dice que todo es un complemento.

Pero la disciplina y pasión por las actividades físicas no llegaron de casualidad a la vida de David, pues en el pasado tenía sobrepeso, tanto así que la chica más guapa del colegio lo rechazó por ser gordito, desde entonces se enfocó en hacer ejercicios y ahora anda pepudo.

“Me ayudó mucho en mi confianza, autoestima y me di cuenta que era capaz de hacer más cosas de lo que esperaba”, dice y también añade que gracias a eso ingresó a trabajar en el desaparecido reality de competencia Combate.

Aunque él logró transformar su físico en el pasado, no fue hasta después de la pandemia que descubrió que podía ayudar a las personas a también hacerlo.

“La gente me preguntaba cómo hice para recuperar mi físico, porque subí de peso en pandemia, entonces vi la oportunidad. Ahora hago entrenamientos funcionales para la gente que quiere mejorar su salud, en el parque de Samanes y en un gimnasio del Sur de la ciudad”, finaliza.