El recordado participante del reality turco El poder del amor 2, el ecuatoriano Hernán del Pozo, reapareció en redes sociales luego de todo tipo de rumores sobre su estado de salud. Desde hace varios meses se especulaba que el exconcursante habría ingresado a una clínica de rehabilitación; sin embargo, la información nunca fue confirmada… hasta ahora.

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Hernán decidió hablar con total honestidad y confirmó que estuvo internado debido a problemas con el consumo de alcohol. En un extenso mensaje, el recodado chico reality compartió su testimonio con una mezcla de vulnerabilidad y esperanza.

“Hace cuatro meses mi vida se detuvo, no por un accidente, sino porque perdí el control. La bebida me estaba ganando y terminé en una clínica de rehabilitación. Fueron los meses más duros de toda mi vida, me tocó vivir en una clínica, cosa que yo nunca me imaginé, porque ya no podía controlar la bebida”, confesó.

El exintegrante del reality explicó que ese tiempo de aislamiento fue clave para reencontrarse consigo mismo. “Con el tiempo entendí que era justo lo que necesitaba y lo digo sin vergüenza porque esconderlo me estaba matando. Me tocó aprender a estar solo, a mirarme de frente, a aceptar mis errores, sin esconderlos detrás de una sonrisa o de una copa”, añadió.

Hernán del Pozo contó su testimonio

Durante su reflexión, Hernán recordó que al principio del proceso llegó a sentirse totalmente desorientado, como si hubiera perdido el rumbo.

“Me sentí megaperdido, sin entender cómo llegué tan abajo. Pero ahí adentro, sin redes sociales, sin ruido, sin gente en la farra, me tocó enfrentarme a mí mismo. Si tú estás pasando por un momento oscuro, créeme, no estás solo. No tengas miedo de pedir ayuda. Caer no te hace débil; negarlo sí es una debilidad”, aseguró.

El mensaje, grabado con tono íntimo y sincero, también incluyó palabras de agradecimiento a quienes lo apoyaron durante el difícil proceso. En el video se muestran imágenes de su nueva rutina. También se supo que continúa con sus entrenamientos en el gimnasio y recientes visitas a la ciudad de Cuenca.

“Yo toqué fondo, pero desde el fondo también se puede mirar hacia arriba. Gracias a los que estuvieron y a los que me soltaron también, porque eso me enseñó quién realmente estaba y era mi amigo. Si tú estás pasando por algo parecido, escucha esto: no tengas miedo de caer, porque a veces el fondo no es el final, es el punto donde realmente empiezas a subir. Y yo sí que estoy subiendo”, expresó.

Con una mirada renovada, Hernán concluyó su testimonio recordando que su proceso no busca aplausos, sino inspirar a otros. “El alcohol era solo una parte. Lo difícil fue mirarme de frente y aceptar que necesitaba ayuda. Y eso no me hace débil, me hizo humano. Hoy no busco que me aplaudan, busco que alguien que esté pasando por lo mismo entienda que sí se puede volver a empezar, y que el valor no está en no caer, sino en decidir levantarte”.

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