La cantante rumana Oana Chelaru ha decidido abrir su corazón y compartir uno de los capítulos más duros de su vida sentimental. La intérprete de 'Duro' habló sin filtros sobre la ruptura que vivió con el subcampeón de peso pluma de la UFC, Yair Rodríguez, conocido mundialmente como La Pantera Rodríguez.

Oana y Yair mantuvieron una relación de varios años, tiempo en el que convivieron y compartieron proyectos y sueños, incluso ella se mudó a México. Sin embargo, el final de su historia no fue fácil. “Me costó un año y cinco meses superarlo. No podía ver a ningún hombre, caí en depresión, no comía, no dormía. Estuve con psicólogo y psiquiatra, tenía pensamientos negativos… no entendía por qué yo sufría tanto. Y lo veía a él feliz, porque a las dos semanas lo vi con otra mujer viajando por todo el mundo”, relató visiblemente conmovida en una entrevista a Mariela Viteri.

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La artista también confesó que durante la relación enfrentó situaciones que minaron su autoestima. Según explicó, su expareja se ponía celoso por su manera de vestir y maquillarse. “Me decía que era su mujer, pero esa presión me llevó a descuidarme, a subir de peso”, comentó y agregó que de 54 kilos llegó a 64, los cuales se le notaban un montó, debido a que pasaba comiendo mal por los diversos viajes a los que lo acompañaba. También añadió que la separación por sus constantes viajes, también hacían que tengan discusiones frecuentes. 

Al mirar atrás, Oana reconoció que había un patrón en sus relaciones sentimentales: hombres que se sentían atraídos por ella con intensidad, pero que terminaban dejándola por otra mujer. Una reflexión que la llevó a indagar en las raíces de sus decisiones amorosas.

Oana Chelaru y sus decisiones amorosas

En la conversación, reveló que parte de sus elecciones erradas tenían relación con la ausencia de su padre durante su infancia. “Desde entonces me contacté con él, recuperamos la cercanía, y entendí muchas cosas. Me di cuenta de que mi energía femenina estaba baja, y que tenía la energía masculina muy elevada, porque era de las que quería resolver todo pagaba mis cosas, no necesitaba a nadie. Por eso atraía a hombres que no debía”, explicó.

Hoy, Oana asegura que ha trabajado en sí misma, fortaleciendo su autoestima y aprendiendo a equilibrar sus emociones. Aunque el recuerdo de aquella relación aún le provoca nostalgia, se muestra más consciente de lo que quiere y de lo que no está dispuesta a tolerar.

Por otra parte, confesó que los primeros meses de su separación, vio en redes sociales que él a los dos meses ya tenía una relación amorosa y que viajaba con la chica a diversos países, algo que también le dolió. "Físicamente es mucho mayor que él y es poderosa económicamente, trabaja para una marca bastante conocida. Ahora que he sanado, le agradezco mucho porque llegó a mi vida a sacar traumas que no sabía". 

Indicó que el momento que la hizo tomar cartas en el asunto de su vida, fue al año y tres meses que ya se dio cuenta que él estaba feliz. Entonces esa mañana lloró, prendió una vela y oró para soltar y sanar todo. Desde entonces cambió su vida y buscó ayuda. Tomó la decisión de darle un giro. 

Con esta revelación, la cantante no solo dejó al descubierto la intensidad de su romance con Yair Rodríguez, sino que también ofreció una lección de resiliencia y amor propio, dejando claro que incluso las heridas más profundas pueden convertirse en fuerza para seguir adelante.

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