Aquiles Álvarez y Marcela Aguiñaga se reunieron para coordinar acciones frente a la inseguridad en Guayaquil, mientras resuelven tensiones por la obra en la avenida del Bombero, mostrando un acercamiento entre ambas autoridades.

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Encuentro de autoridades en Guayaquil

La tarde del viernes 29 de agosto se registró un encuentro sorpresivo en la Gobernación del Guayas, donde el alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, y la prefecta del Guayas, Marcela Aguiñaga, se reunieron con el ministro del Interior, John Reimberg, y altos mandos de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional. 

La sesión, parte del Consejo Provincial de Seguridad, tuvo como objetivo analizar la creciente ola de inseguridad que afecta a Guayaquil y al resto de la provincia. 

También participaron alcaldes y representantes de los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD), consolidando un espacio de coordinación entre autoridades locales y nacionales. Hasta horas de la tarde, no se habían emitido declaraciones oficiales sobre los acuerdos alcanzados o las medidas que se implementarían.

Avenida del Bombero: congestion vehicular y conflicto por obras

La avenida del Bombero se ha convertido en un punto crítico de tránsito y en un escenario de disputas políticas, la suspensión de la construcción de dos pasos a desnivel en la ciudadela Los Ceibos.

Esta fue ordenada por la Prefectura del Guayas tras notificaciones del Ministerio de Ambiente sobre posibles irregularidades en el registro ambiental, provocó tensiones entre Álvarez y Aguiñaga. 

La Prefectura solicitó que el Municipio retire los materiales que bloquean la vía y rellene las áreas intervenidas, advirtiendo que, de no hacerlo, lo ejecutaría por su cuenta. 

En respuesta, Álvarez calificó la acción como un posible caso de "peculado" y destacó que la Contraloría General del Estado tiene el derecho de intervenir y tomar las acciones legales correspondientes.

Acercamiento y coordinación entre autoridades

A pesar de la tensión inicial, el plazo para retirar las vallas fue pospuesto, lo que ha permitido un clima más conciliador entre el alcalde y la prefecta. 

Ambos funcionarios han dejado a un lado los enfrentamientos públicos recientes, mostrando señales de coordinación, Álvarez, además, hizo un llamado público a la responsabilidad en la gestión de la ciudad.

Enfatizando la importancia de proteger los espacios urbanos y evitando que los problemas administrativos afecten a los ciudadanos, este acercamiento sugiere una disposición de las autoridades locales y provinciales a trabajar de manera conjunta frente a los desafíos de seguridad y movilidad en Guayaquil.

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