El alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, volvió a elevar el tono contra lo que considera bloqueos administrativos del Gobierno central. Esta vez, el reclamo apunta directamente a la Agencia Nacional de Tránsito (ANT), entidad que —según dijo— mantiene frenada la operación del terminal terrestre de la vía a la costa, una obra municipal que ya está concluida desde hace casi dos meses, según manifestó.

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Durante su enlace radial de este miércoles 17 de diciembre de 2025, Álvarez comparó esta situación con los procesos suspendidos en el Servicio Nacional de Contratación Pública (Sercop) y aseguró que existe un patrón sistemático para impedir el avance de proyectos en la ciudad.

Un terminal listo, pero sin permiso

Oficialmente llamado como Terminal Terrestre Municipal Costa, está ubicado en el kilómetro 33 de la vía Perimetral y forma parte del plan municipal para ordenar el transporte interprovincial, reducir la congestión en la ciudad y atender a los usuarios del sector oeste de Guayaquil.

Según el alcalde, la infraestructura —que bordea una inversión de 11,5 millones de dólares— está completamente terminada desde hace casi 60 días, pero no puede operar por la falta de autorización de la ANT.

“No podemos tener un terminal terrestre de 11.5 millones de dólares terminado, hace casi 60 días, por un capricho de la ANT de no dar el permiso y no aprobar la tasa para poder funcionar”, reclamó Álvarez.

El antecedente del Sercop con Aquiles Álvarez

Álvarez recordó que este caso se suma a otro conflicto reciente con el Gobierno central. El 20 de noviembre, el Municipio de Guayaquil denunció que el Sercop mantiene suspendidos 16 procesos de contratación municipal, algunos por más de 50 días.

En ese momento, el alcalde calificó la situación como un “patrón de bloque administrativo”, una expresión que volvió a usar para referirse ahora al terminal terrestre.

“Así como el Sercop tiene 27 días bloqueando procesos, el terminal está para los 50 sin permiso para operar”, afirmó.

En un discurso frontal, Álvarez aseguró que no existen observaciones técnicas claras y que las negativas responden únicamente a una intención de frenar el progreso de la ciudad.

“No exigen nada, solo es ganas de joder, ganas de que Guayaquil no progrese, ganas de frenar todo”, dijo al aire. El alcalde añadió que el Municipio ha recibido numerosos escritos de ciudadanos solicitando que el terminal entre en funcionamiento lo antes posible.

Álvarez anunció que el Municipio esperará hasta este viernes por una respuesta formal. De no ocurrir, advirtió que el lunes 22 de diciembre se tomarán acciones de presión pública.

“Vamos a poner una pancarta gigante con nombre y apellido para que sepan quiénes son los que frenan el desarrollo de Guayaquil y no dan un permiso para que el terminal funcione”, señaló.

No obstante, insistió en que su administración actúa dentro del marco legal. “Nosotros respetamos las leyes y los procedimientos, no atropellamos”, recalcó.

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