Ni posturas imposibles del Kamasutra, ni sesiones tántricas maratónicas ni gastar fortunas en juguetes sexuales. El deseo sexual sube y baja en todas las parejas, pero cada vez más mujeres deciden explorar su placer sin esperar a que otro las lleve al clímax.

“Muchas no se masturban porque no han aprendido o no les interesa, Pero gracias a la revolución de los juguetes eróticos ese número está bajando”, dice Ana Lombardía, experta en bienestar sexual, al portal web Menshealth.

Hoy hay una generación que toma el control. Y con algunos trucos avalados por sexólogos tú también puedes ayudar a tu pareja a llegar al orgasmo en apenas 15 minutos… o menos. Sin ansiedad por la eyaculación precoz ni presiones por maratones en la cama.

Besos de arranque

Los primeros 3 minutos son para besar. Estudios del Lafayette College (EE. UU.) confirman que los besos reducen el cortisol y aceleran la excitación. Inclina la cabeza a la derecha para parecer más cariñoso y disparar su oxitocina. No te limites a la boca: un 96 % de mujeres encuestadas por William Cane, autor de El arte de besar, prefiere el cuello como zona de calentamiento.

Cada vez que la beses, quítale una prenda. Un estudio de la Universidad de Cincinnati halló que sentirse bien desnuda acelera el orgasmo. Elogia cada parte de su cuerpo mientras la desnudas; su autoestima subirá y en tres minutos tendrás una fiera en tus manos.

Expectativa antes del oro

Aunque esté casi desnuda, deja la ropa interior un minuto más (en total 2). “Acaríciala a través de la tela para crear expectación”, aconseja la terapeuta sexual Paula Hall. Después retira la ropa interior y usa lubricante. Con dedos lentos y circulares, estimula el tercio externo de la vagina: allí conviven clítoris, punto G y punto PS.

Sexo oral con técnica

Para el 80 % de las mujeres, el clítoris es la vía más confiable al clímax, según el Instituto Masters & Johnson. La educadora sexual Lou Paget recomienda el método Kivin: levantar suavemente el capuchón del clítoris con una mano y, con la lengua, estimular de lado a lado la base. Con la otra mano presiona suavemente el perineo -debajo de la entrada vaginal-. Cuando notes contracciones previas al orgasmo, estás en la zona correcta. Esto se lo realiza por 3 minutos.

Penetración y control

Los orgasmos no dependen solo de los preliminares. The Journal of Sexual Medicine halló que la constancia del orgasmo está más ligada a la duración del coito que a los juegos previos. Evita empujones profundos; prueba la Técnica de Alineación Coital: empieza con el misionero y apoya la base del pene sobre su clítoris. En vez de embestir, balancéate para masajear su clítoris y ganar control por 6 minutos.

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El toque final

En este punto ella debería estar arañando las sábanas. No cambies de técnica en el último minuto. “Las mujeres odian el exceso de cambios; nos distrae y baja la excitación”, advierte la sexóloga Joni Frater. Si algo funciona, sigue igual, misma velocidad y presión hasta el final.

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