El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el primer ministro británico, Keir Starmer, firmaron este jueves 18 de septiembre una alianza tecnológica destinada a reforzar la cooperación bilateral en áreas estratégicas como inteligencia artificial, computación cuántica y energía nuclear.

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“Es el mayor paquete de inversión de este tipo en la historia británica”, declaró Starmer en su residencia de campo, Chequers, donde recibió al mandatario estadounidense en el marco de su visita de Estado. El acuerdo fue calificado como “innovador” y como un paso determinante en la relación económica de ambos países.

Inversión sin precedentes

El pacto contempla compromisos de inversión por 150.000 millones de libras (205.000 millones de dólares) provenientes de gigantes tecnológicos y grupos financieros estadounidenses. Se espera que este paquete impulse proyectos en energía limpia, ciencias de la vida, manufactura avanzada e inteligencia artificial.

Entre los compromisos más relevantes figura Blackstone, que destinará 100.000 millones de libras (más de 135.000 millones de USD) en la próxima década; Prologis, con 3.900 millones de libras (más de 5.200 millones de USD) para ampliar el campus biomédico de Cambridge y modernizar el puerto seco de Daventry; Palantir, que invertirá 1.500 millones de libras (más de 2.000 millones de USD) en el sector militar; y Amentum, con 150 millones de libras (más de 200 millones de USD) para generar más de 3.000 empleos especializados.

Impacto laboral y económico

El gobierno británico anunció que la cooperación derivada de este acuerdo permitirá la creación de 15.000 empleos en el Reino Unido, reforzando el argumento de que la “relación especial” entre ambas naciones produce beneficios tangibles para la población trabajadora.

El primer ministro Starmer subrayó que estas inversiones son una representación directa del valor estratégico de los lazos económicos con Estados Unidos: “En última instancia, esa es la prueba de la relación especial: cuánto beneficia a la gente honesta y trabajadora”, afirmó.

Una cooperación recíproca

La iniciativa también contempla un componente de reciprocidad. Empresas británicas como GSK, BP, Sage y Revolut anunciaron planes de invertir más de 33.000 millones de libras (más de 44.000 millones de USD) en territorio estadounidense, reforzando así los vínculos bilaterales.

El “Acuerdo de Prosperidad Tecnológica”, anunciado simultáneamente, impulsará inversiones por más de 31.000 millones de libras (más de 41.000 millones de USD) en IA, computación cuántica y energía nuclear, con la participación de gigantes como Microsoft y Google.

La importancia estratégica

El acuerdo firmado en Chequers no solo representa un hito económico, sino también un símbolo político de la solidez de la alianza entre Estados Unidos y Reino Unido. En palabras de Trump, el vínculo entre ambos países es “eterno” e “inquebrantable”, mientras que la presencia de empresas de talla mundial reafirma el carácter estratégico de esta cooperación.

Con este paquete de inversiones, Estados Unidos y Reino Unido marcan un precedente en el fortalecimiento de la relación bilateral, apostando por sectores clave para el futuro tecnológico y energético de ambas naciones.

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