Nicolás Maduro ordenó el cierre inmediato de la embajada venezolana en Oslo, capital de Noruega, tres días después de que la líder opositora María Corina Machado recibiera el Premio Nobel de la Paz.

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La Cancillería noruega confirmó que la delegación venezolana comunicó la decisión sin ofrecer justificaciones oficiales. Las instalaciones quedaron cerradas y los canales de atención diplomática fueron desactivados.

Según medios internacionales, esta medida forma parte de una reestructuración más amplia de la política exterior venezolana, que también incluye el cierre de la embajada en Australia.

Noruega lamenta la decisión

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Noruega calificó el cierre como “lamentable” y señaló que no recibió ninguna explicación formal de parte de Caracas. “Seguimos abiertos al diálogo con Venezuela”, expresó la cartera en un breve comunicado.

La noticia fue difundida y confirmada por medios como Reuters, The Guardian y Agence France-Presse, que subrayaron la coincidencia temporal entre el galardón y la decisión diplomática.

Un Nobel que incomoda a Maduro

El Comité Nobel noruego destacó el trabajo de Machado por su “lucha incansable por los derechos democráticos del pueblo venezolano” y su impulso a una “transición pacífica hacia la democracia”.

El régimen de Maduro reaccionó atacándola públicamente, calificándola de “bruja demoníaca”. Aunque el gobierno venezolano no ha vinculado oficialmente el cierre con el Nobel, la proximidad entre ambos hechos ha desatado especulaciones sobre un mensaje político hacia el país que concede el premio.

Lo que implica el cierre

Con el cierre de la embajada, los servicios consulares para venezolanos en Noruega serán atendidos por misiones concurrentes en otros países. Tampoco se conoce qué ocurrirá con el personal diplomático que laboraba en Oslo.

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