7 veces SÍ

El 4 de febrero decidiremos por 7 preguntas en las urnas. No votaremos por ningún líder o partido, nadie será candidato. Sí votaremos por lo que beneficie a cada familia del Ecuador. Y luego todos a enfocarnos en lo esencial: mejorar la economía, levantar el agro, crear empleo.

Por mi parte, votaré sí a cuidar a nuestros niños, como me sugirió Ángela Rugel en su comedor de 40 años en Daule, para que jamás queden en impunidad abusos sexuales como los del colegio réplica Aguirre Abad en Guayaquil.

Votaré sí a reactivar la construcción: más empleo para nuestros albañiles, gasfiteros, carpinteros, electricistas, maestros de obra y medio millón de ecuatorianos que trabajan en el sector, además de la industria del cemento y el transporte, o la señora que vende almuerzos a la esquina de una obra en Milagro y ya no vende porque la Ley de Plusvalía -que urge derogar- paralizó la construcción.

Votaré sí a que los corruptos nunca sean candidatos, una vez juzgados por las cortes. Una especie de boleta de auxilio para alejar del dinero del pueblo a quienes ya nos defraudaron. ¿Se imaginan que un pillo sentenciado quiera ser Prefecto de Guayas?

Votaré sí a la alternancia: como dice Pepe Mujica, “la reelección indefinida es monárquica”, y hay que permitir el recambio generacional hasta en la más pequeña junta parroquial.

Votaré sí a que el Consejo de Participación Ciudadana sea elegido por el pueblo en las urnas. No más ratones cuidando el queso que permitan la corrupción.

Votaré sí a respetar el medio ambiente en actividades mineras y petroleras, en zonas como Naranjal, para proteger la naturaleza y las vidas humanas.