Cartas al director: Madres que están en el cielo

Lamento aceptar que no supe aprovechar el tiempo en que mi madre estaba viva. Ahora es demasiado tarde para reconocerlo y siento que he perdido lo más valioso de mi vida. Ellas representan a Dios en la Tierra. Quien no valora si tiene a su progenitora viva es un inconsecuente y no aprecia el extraordinario regalo que Dios le otorga.

Ellas no han muerto, viven en nuestros corazones. Están en el cielo para protegernos mediante un directo contacto con la Divinidad. Quiero transcribir pocos pensamientos en su homenaje. Entre ellos, los siguientes: “En este lindo día de felicitaciones, flores, postales y homenajes solo faltas tú, mamá. El destino quiso que te fueras y no estuvieras a nuestro lado, pero nada ni nadie podrá arrancarte de nuestros corazones, en donde estará para siempre tu recuerdo y memoria. Felicidades para ti mamá, allá en el cielo, en la gloria o donde estés.” “A veces llevo flores a tu tumba, a veces hablo con otros de ti, pero siempre, madre mía, te tengo en mi corazón.”

Quiero rendir homenaje a las profesoras progenitoras que en vida se sacrifican por sus hijos, los hijos de sus hijos y sus alumnos que también los consideran hijos. Es decir, son tres veces madres.

Lic. Ricardo Ordóñez Jaramillo.

¿Qué significa “ludir”?...

Hay palabras a las cuales algunas personas las utilizan en forma indebida, equivocada. Y una de ellas es el verbo “ludir”, que significa frotar, rozar una cosa con otra. Y no tiene nada que ver con “eludir”.

Josefina Cedeño, Manta, Manabí.