Cartas al director: Pasado, presente y futuro

La ley fundamental del cambio se produce y se reproduce inevitablemente por el elemento “tiempo”. No todo lo positivo o negativo hoy ha sido siempre así. Con el tiempo todo cambia, todo se transforma, nada queda como está. Lo que somos es producto de nuestro pasado, lo que seremos es producto de nuestro presente. El tiempo le pidió tiempo al tiempo para hacer realidad todos sus sueños, ilusiones y esperanza. Muchos estamos de acuerdo que hay una década perdida, pero el cambio revolucionario se dará.

Antonio Machado señala: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”. Debemos ser responsables con el tiempo, pero no debemos de temer a la muerte, porque “Cuando nosotros estamos, ella no está y cuando ella está, nosotros ya no estamos”.

Debemos orientar el recorrido de nuestra vida, por la lógica humanista debemos analizar que cada día debemos ser mejores, no puede ser que al concluir una noche, tengamos que decir que no hemos hecho nada. Esa irresponsabilidad no debería tener cabida, más bien, debemos proyectarnos positivamente, reconociendo que en el día hemos realizado actividades positivas y como el futuro está en nuestras manos debemos proyectarnos para que mañana sea mejor.

El tiempo parece que nadie lo controla, que son inapelables las personas de fe, deberían identificarlo con su Dios o a su religión que tenga.

Vive la vida hoy, vívela, aunque mañana partamos al más allá...

Lic. Ricardo Ordóñez Jaramillo