Opinión
Creció la burocracia en el 2018. ¿Y la austeridad...?
MÁS DE UNA vez, voceros del gobierno de Lenín Moreno han anunciado planes de austeridad, que comprenden la rebaja de sueldos de ciertos burócratas y legisladores, además de supuestos ahorros de fondos públicos por aquí y por allá. Pero los números son distintos. El caso más patético es la designación de 17.822 nuevos empleados públicos, que se crearon el 2018 en áreas sociales, confirmado oficialmente con las nuevas afiliaciones al Seguro Social. Recordemos que el exministro del Trabajo, Raúl Ledesma, prohibió la incorporación de más personal con la modalidad de “contratos por servicios ocasionales, salvo excepciones justificadas”. Por su parte, en el Ministerio de Finanzas se dijo que este año se han planteado la meta de reducir los sueldos de burócratas en 205 millones de dólares. Eso habrá que ver “a la hora de la verdad”, como se dice.
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POR OTRA PARTE, la esperada disminución de tantos “pipones” que ingresaron al IESS durante el correato está aún pendiente, mientras la Contraloría advierte que, a este paso, las reservas económicas que cubren las pensiones a unos 450 mil afiliados se agotarán no el año 2046, como se dijo en un primer momento, sino el 2034, en que habrá un faltante de 2.777 millones de dólares, por lo menos.
Y habrá un déficit de 170 millones de dólares para atender la salud de los afiliados el año 2021, es decir “a la vuelta de la esquina”.
¿No habrá cómo cortar de raíz tantas irregularidades en un organismo tan importante para los ecuatorianos como es el Seguro Social...?