Opinión
Desde la redacción: ¡Que no nos den gato por liebre!

Por: Juan Manuel Yépez
@juanmayepez
Hay una terrible y orquestada confusión con respecto al proyecto de ley sobre la Protección de los Derechos a la Intimidad y Privacidad sobre Datos Personales, que se discute en la Asamblea. Si bien es cierto que todos los ciudadanos debemos proteger nuestra intimidad a toda costa, con el fin de no ser víctimas de estafadores y acosadores de cualquier tipo, también es verdad que en nombre de este derecho los corruptos aplaudirán y empujarán la iniciativa. Es urgente que los asambleístas aclaren los alcances de este proyecto, ya que el espíritu legal no debe proteger de ninguna manera a quienes manejan los recursos del Estado. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que su gestión debe estar cobijada exclusivamente por la transparencia y rendición de cuentas, pero veo que este régimen hace todo lo posible por blindarlos de cualquier responsabilidad.
Ya lo hizo en la comunicación con esa cantinflada del linchamiento mediático, que prohíbe la difusión de información reiterada y concertada en uno o más medios para desprestigiar a una persona natural o jurídica o reducir su credibilidad pública. Está claro que solo los poderosos usarán esta especie de salvavidas para salir airosos de cualquier susto. La obligación del poder político es proteger a los ciudadanos del mal uso de los datos personales, pero su gestión debe estar siempre bajo vigilancia porque la vida de los personajes públicos es eso... pública, porque así lo decidieron cuando optaron por esta alternativa. Pero también es nuestra obligación no dar papaya en las redes sociales entregando información innecesaria que nos pueda poner en peligro por confiados. Es hora de que pidamos cuentas a los legisladores sobre esta iniciativa para que no nos den gato por liebre.