Editorial: Las lluvias, problema de todos los años

Con la llegada de la llamada estación invernal, que es provocada a comienzos de cada año por la presencia en nuestras aguas territoriales de la corriente del El Niño, se han presentado las primeras lluvias que deberán prolongarse hasta el próximo mes de abril, o mayo, que es cuando regresa desde el sur la fría corriente de Humboldt.

En cada estación lluviosa se crean problemas citadinos sobre todo en las calles y avenidas al producirse el natural desgaste del pavimento, lo cual trae consigo que se produzcan baches que atentan contra el tráfico vehicular y, consecuentemente, también contra la seguridad de los transeúntes. Por ello las autoridades municipales tienen que poner a trabajar sus equipos mecánicos para ir solucionando estos problemas en la vía pública a medida que se vayan presentando.

La población porteña se alista a protegerse de la caída de las aguas que, algunas veces, si la pluviosidad llega con determinada fuerza, puede provocar molestias en las viviendas, sobre todo en los sectores populares, es decir en las zonas suburbanas en donde se utilizan materiales de poca resistencia como la madera y la caña guadúa. El desborde de ríos también es un problema que se deberá tomar en cuenta para prevenir tragedias.