Editorial: Tropiezos en la Liga Profesional de Fútbol

En busca de mejorar las condiciones de los clubes de fútbol se organizó la Liga Profesional de este deporte. Sin embargo, la iniciación de sus actividades sufre un serio traspié, cuando Barcelona decide salir de esa organización.

El fenómeno futbolístico en Ecuador tiene características especiales que, sin embargo, no se pueden insertar en los principios que han hecho de las capitales futbolísticas verdaderos imperios no solo en cuanto a la adhesión de los aficionados, sino en las mismas finanzas de los clubes que manejan cifras verdaderamente millonarias.

Los problemas que enfrenta la Federación Nacional hicieron que se pensara en una nueva organización de este deporte y, venciendo una serie de problemas pareció que la Liga se iniciaría con bien pie. No ha sido así y las dificultades comenzaron a presentarse y hay disidencias muy delicadas.

Todo comienzo suele ser difícil, pero la voluntad y los deseos de mejorar las cosas vencen las dificultades. Los aficionados esperan que las objeciones presentadas por la dirigencia de Barcelona no causen un daño irreparable a la Liga cuyos defectos deben enmendarse, pero que no pueden hacer desaparecer una iniciativa que se acogió con la unanimidad de los clubes.