Opinión
...Ya es hora de quitarnos la máscara...
Rodrigo Contero Peñafiel
Parece que en el país muy dolorosamente las personas exploran lo que hay detrás de la máscara de cada individuo, incluso detrás de la máscara con la que se han estado engañando a sí mismos en estos últimos años, convirtiéndose en una fachada de inacción y conformismo.
La racionalidad intelectual es un proceso viviente que se siente, interactúa y se relaciona con los demás, nos hace sentir cómodos y sentimos que somos nosotros mismos, que vemos a las otras personas como iguales, es un proceso que nos convierte en seres humanos.
Los últimos acontecimientos de la vida nacional nos llevan a pensar que alguien miente, la razón no pide fuerza para entender que todos debemos hacer lo que sabemos, lo que aprendimos. La improvisación y el despotismo van descubriendo desastre que hoy sufre la sociedad y el país.
Luego de una década de viveza tecnificada y corrupción a raudales, las máscaras se van cayendo, no se puede haber tratado a las personas como si fuesen objetos, a no ser que el compromiso o la mediocridad hayan superado los sentimientos para caer en el fondo de la desvergüenza.
Hoy tenemos un país en crisis donde la corrupción, el engaño y la falta de sentimientos no han sido desmentidos por las mentes lúcidas, los corazones ardientes y las manos rápidas que vivieron una época de bonanza y confrontación donde el capataz era el rey y los mediocres los sumisos.
Llegó la hora de cambiar, de quitarse la máscara y decir la verdad; de crear un clima de transparencia para que se renueven las familias, las instituciones y la política. Que se respete el mandato popular, la Constitución y las leyes para obtener resultados; de que exista menos ansiedad y más confianza en nosotros mismos.