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Quito

Una joven denunció ser abusada sexualmente durante la ley seca, en un motel de Quito
La víctima habría golpeado a su agresor con una botella. Llamó a un amigo para que la salvara. La Policía detuvo al sospechoso y lo llevó ante la ley
Una chica salió junto a un amigo para disfrutar de una fiesta clandestina y la cita por poco acaba en tragedia. A las 03:00 de ayer, durante la ley seca por la consulta popular, personal de la Policía Nacional recibió la alerta de que se habría registrado un delito de carácter sexual dentro de una de las habitaciones de un reconocido motel de Quito.
El establecimiento, según información oficial, está ubicado en el sector de Fajardo, en el cantón Rumiñahui, media hora al suroriente de la capital.
Según el parte policial al que EXTRA tuvo acceso, una joven de 21 años llamó desesperada a un amigo cerca de la 01:30. Le habría dicho que estaba dentro del motel con un joven con quien había estado consumiendo bebidas alcohólicas por varias horas.
En medio de la conversación, la mujer habría dicho que, al parecer, había aprovechado un descuido de su acompañante para llamarlo. Además, le habría asegurado que se sentía mal y que necesitaba que la sacara de ahí cuanto antes, porque, según ella, su compañero de copas tenía malas intenciones y temía por su integridad.
Supuesta agresión sexual
Mientras la llamada seguía en línea, la joven contó que el acompañante se puso agresivo al darse cuenta de que hablaba por teléfono con otra persona. De acuerdo con el reporte, él habría empezado a tocarla sin su consentimiento, por lo que ella tomó una botella y le golpeó en la cabeza en un intento desesperado por defenderse.
El amigo, sin perder tiempo, llegó al motel y pidió a los recepcionistas que le abrieran la habitación. Cuando entró, según el testimonio que le dio a los agentes, encontró al hombre encima de la joven, por lo que lo apartó de inmediato.

Agentes del Distrito Rumiñahui arribaron y observaron que el presunto agresor estaba en el estacionamiento, dentro de su vehículo, con una herida abierta en la cabeza, producto del botellazo que recibió.
Los uniformados lo aprehendieron en el acto y lo trasladaron hasta la Unidad de Flagrancia, para iniciar el proceso judicial en su contra. Mientras tanto, la chica fue acompañada por sus parientes a una casa de salud y luego la llevaron a colocar la denuncia.
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