El hombre de la cinta de seguridad parece apurado. Toma con rapidez los productos del congelador de una tienda de abarrotes, ubicada en Conocoto, en el suroriente de Quito mientras, al parecer, realiza una llamada telefónica. Ni por un segundo, la dependiente del negocio sospecha los robos que el sujeto de la mascarilla negra realiza en su tienda.

Pese a eso, los sutiles movimientos del hombre fueron registrados en la videocinta de ese local y en las grabaciones de, al menos, otros tres comercio de esa zona. Los afectados aseguran que las pérdidas son cuantiosas, especialmente porque el hombre elige productos empacados como carnes, salchichas y otros embutidos.

Algunas de las víctimas han indicado que el acento del sospechoso no es ecuatoriano. En la descripción que han dado a la Policía dicen que es alto, de contextura gruesa. Casi siempre lleva chispa y gorra negra. Además de la bolsa, colgada al hombre, en la que guarda lo robado.

Al momento los uniformados siguen la pista del sujeto que ya ha sido reconocido por los comerciantes, especialmente por la forma en la que opera. Aunque parece que el el hombre trabajará solo, los residentes aseguran que se moviliza en un taxi que lo ayuda alejarse del lugar rápidamente.

Debido a que en las últimas semanas este tipo de actos se han incrementado en Conocoto, algunos de los vecinos proponen vigilancia comunitaria para ubicarlo. Incluso sugieren una especie de ajusticiamiento para evitar que estas prácticas continúen en el lugar.