Los familiares de Anthony Muñoz, un joven de 22 años, la mañana de este viernes 1 de agosto estaban sumidos en la tristeza y la angustia. Se alistaban para velar al muchacho y, al mismo tiempo, estaban pendientes a noticias médicas del padre del chico, quien está internado en un hospital.

(Te invitamos a leer: Cargamento de 'narcoalmendras' fue incautado en empresa de encomiendas en Guayaquil)

Ambos fueron parte de las víctimas de una balacera ejecutada la noche del jueves 31 de julio en la cooperativa Nueva Granada, ubicada en el Guasmo Central, en el sur de la urbe porteña.

El hecho se registró aproximadamente a las 20:30, en los exteriores de una unidad educativa de la zona.

En ese punto, varios moradores se encontraban reunidos conversando e ingiriendo cervezas. De hecho, hasta esta mañana aún estaban tiradas las botellas fuera del plantel escolar, pero luego fueron retiradas por una pareja de residentes que limpió el sitio.

“Se habían reunido allí para distraerse un momento luego del trabajo. Todos son vecinos, estaban tomando”, comentó una residente.

Acotó que siete personas recibieron impactos de arma de fuego y que tres murieron, aunque según datos policiales recabados hasta el momento, solo hubo dos fallecidos.

De acuerdo con la información policial, sujetos armados que se movilizaban a bordo de un carro y motocicletas llegaron al sitio para disparar contra el grupo de vecinos, arruinando el momento de esparcimiento que pasaban.

Luego del suceso criminal, cerca de aquel lugar hubo lanzamiento de juegos pirotécnicos. Cuando ocurre esta situación después de ataques armados, generalmente se atribuyen a posibles celebraciones de agrupaciones delictivas implicadas.

No sabía lo de su hijo

Una de las familiares de Muñoz comentó apenada que el padre del joven, como se encontraba herido de gravedad en un centro médico, no se había enterado del fatal desenlace de su vástago.

“Esto que pasó ha sido duro. Ellos dos trabajaban juntos, laboraban en lo que les salía, también en carpintería”, dijo la mujer.

No tenían pasado judicial

Este viernes por la mañana, un grupo de agentes policiales se hizo presente en el sitio. Uno de ellos, el subteniente de policía Darwin Benítez, dijo que “se han verificado los antecedentes de estas personas (las víctimas) y ninguna tiene antecedentes penales o algún tipo de situación legal”.

Según el agente, se está averiguando cuál pudo ser la motivación del suceso criminal, considerando que los baleados no tenían un prontuario delictivo. Sin embargo, el uniformado mencionó que no se descarta que el hecho esté relacionado con retaliaciones entre grupos delictivos que mantienen una disputa por territorios en el distrito Sur, al cual pertenece aquella área de la ciudad.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad y sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!