Revisaban las cámaras de seguridad cuando notaron algo inusual. Dirigentes del mercado de San Roque, en el centro de Quito, se toparon con una grabación en la que cinco personas salían del centro de abastos en estado etílico. Lo curioso del hecho es que no se trataba de vendedores sino de “empleados municipales”, asegura Juan Baez, presidente de la Federación de Mercados de Quito.

Este hecho, captado en 17 de julio de 2020, causó indignación entre los dirigentes del recinto. quienes afirman que han luchado los últimos meses por mejorar la imagen que tiene el sitio ante la comunidad. La crisis sanitaria actual, las ventas ambulantes y problemas de seguridad son algunas de las causas que dificultan la reactivación de la economía en esa zona de comercio.

“Lo que más nos molesta es que estas personas que trabajan en el Municipio deben dar ejemplo y cumplir con las normas restrictivas. Pero no. Lo que hacen es embriagarse en pleno toque de queda”, describe Báez, quien asegura que el hecho se registró a las once de la noche.

Exigen sanciones

Después de analizar el corto, los dirigentes de los comerciantes solicitaron a las entidades de control que se sancione a los infractores. Sin embargo, hasta el momento “no han dado respuesta al pedido”. Incluso han tratado de tener una audiencia con el alcalde de Quito.

“Es difícil entender cómo se manejan estas cosas porque a nosotros como comerciantes si nos pasamos unos 20 minutos del horario nos ponen suspensiones.... Gente así no puede estar manejando nuestros mercados”, añade Báez, quien también es el representante de la organización 8 de marzo del mercado de Chiriyacu, en el sur de Quito.

EXTRA se contacto con la Agencia de Coordinación Distrital del Comercio para obtener un pronunciamiento al respecto. Rommel Rosero, coordinador de la dependencia, indicó que se inició una investigación interna y “los procedimientos administrativos que corresponden para determinar sus eventuales responsabilidades y las sanciones correspondientes, respetando el debido proceso”.