Un joven de 18 años de edad fue  investigado por la Fiscalía de la ciudad de Cuenca, provincia del Azuay, y sentenciado porque iba empujando una motocicleta que no le pertenecía. 

En el momento del procedimiento, los agentes descubrieron que el muchacho había robado la moto, pero aunque no sabía manejar, decidió llevársela y la empujó por varias cuadras. 

Según los datos proporcionados por Mario Castro, jefe de la Subzona de Policía del Azuay, el robo fue alertado por el Sistema Integrado de Seguridad Ecu-911, desde donde se difundió las características del vehículo sustraído, el cual fue localizado en el parque.

El joven se habría sustraído el vehículo unos minutos antes de ser descubierto. Él vio abiertas las puertas de un domicilio, ubicado a cinco cuadras del sitio, y presuroso sacó la motocicleta estaba dentro de la propiedad.

Según información del personal policial, el detenido admitió haber cometido el delito y durante la Audiencia de Formulación de Cargos, realizada horas después, el sospechoso se acogió al recurso de proceso abreviado. El juez de Flagrancia lo sentenció a un año de privación de su libertad.

Tras la detención del implicado, el propietario reconoció la moto como suya, y sostuvo que unos minutos antes la había estacionado en el garaje de la casa, dejando la puerta abierta. (JM)