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Marco Vera es comunicador audiovisual y da cursos de efectos especiales en vídeos.Gelitza Robles / EXTRA

‘Paniqueados’ por ovni ‘trucho’

El clip, en el que se ve un supuesto platillo volador en Guayaquil, se viralizó. Su creador tuvo que aclarar que era una noticia falsa.

Fue como retroceder 80 años. El especialista en el estudio de los Objetos Voladores no Identificados (OVNIs), Jaime Rodríguez, no daba crédito a lo que un locutor radial decía al aire: “Vi ese vídeo del ovni y me escondí debajo de la cama”.

A diferencia de la obra radiofónica La guerra de los mundos, de Orson Welles, que, en 1938, desató la histeria por una supuesta invasión extraterrestre en Estados Unidos, el comentario del locutor desató la risa de su coanimadora.

El asustado comunicador se refería a un vídeo grabado en Guayaquil en el que se veía a un supuesto platillo extraterrestre sobrevolando el cielo porteño.

Este video, que dura 11 segundos, se viralizó. Hasta ayer tenía 1.479 tuits con el hashtag #OvniGuayaquil.

Lo que en ese instante no sabía el hombre frente -relató Rodríguez- es que el material era un montaje hecho hace seis meses realizado por el guayaquileño Marco Vera Argüello.

Parado en el mismo lugar donde grabó la escena, el comunicador audiovisual, de 35 años, ríe y recuerda que estaba sentado en su oficina cuando un pana le avisó que su montaje estaba causando roncha en las redes sociales.

Ríe. Relata que, además de trabajar en la dirección y postproducción de un programa municipal, da cursos particulares de After Effects, un programa computarizado para hacer montajes y efectos especiales.

Fue una demostración

En marzo pasado para mostrarle a un alumno lo que se podía hacer con esta aplicación se subió a la terraza de su oficina, ubicada al norte de Guayaquil, y grabó el cielo nublado.

Luego descargó un vídeo de un platillo volador de internet y, en 20 minutos, tuvo listo el resultado. Lo subió a su cuenta de YouTube con el título “Ovni en Guayaquil”.

Pero para su sorpresa, el pasado jueves, a alguien más se le ocurrió difundirlo como una avistamiento real. “Pensé: si la gente cree que es un dron quiere decir que hice bien mi trabajo”, bromea el profesional.

Tan bien hizo su trabajo, que ese mismo día recibió decenas de mensajes preguntándole sobre la veracidad del contenido.

“Entonces nosotros empezamos a investigar y dimos con la dirección exacta donde se hizo el vídeo. Paralelamente, buscamos a quien lo hizo”, comentó.

Jaime habló con Marco y este le contó lo que había pasado.

Confirmó que no fue el responsable de difundir el material y decidieron realizar una aclaración para no alarmar a los usuarios en las redes sociales. “Eso le enviábamos a quienes nos pedían explicación”, detalló.

Para Rodríguez, este hecho demuestra que a través de la internet “es fácil causar histeria en las personas” con contenido que resulta ser un montaje. O como lo ocurrido en Estados Unidos, hace 80 años, cuando Orson Welles ‘descubrió’ el alboroto que pueden causar las fake news (noticias falsas).

“Lo difunden para generar likes”

Jaime Rodríguez

Explicó que hay una serie de pasos para analizar este tipo de vídeos y confirmar su veracidad. A él le llegan aproximadamente 10 grabaciones diarias relacionadas a avistamientos de ovnis. A estos contenidos ellos aplican un proceso llamado termograma, “que analiza el nivel de temperatura del objeto”.

Explicó que si esa temperatura no se manifiesta en colores, el gráfico es falso. Precisó que hay muchas personas que se dedican a la difusión de este tipo de materiales “solo para generar likes”.