¡Los huérfanos que la violencia dejó!

La pequeña Samanta, de cinco años, corría inocente entre los arreglos florales que cercaban el ataúd de su mami, Katty Vanessa Velasco Pinargote, asesinada en Colombia junto con su pareja, Óscar Efrén Villacís Gómez.

Desde hace doce horas ella y sus familiares habían visto llegar los restos de la mujer a esa humilde casa de la Cooperativa Unidos Venceremos, este de Santo Domingo. Y la tristeza seguía allí reinando en el ambiente.

Un duro momento en el que todos los presentes gritaron estrepitosamente y lloraron sin consuelo. Era verdad que la habían asesinado. Guacho y el frente subversivo, Oliver Sinisterra, la convirtieron en huérfana a la infante. Así de directo y de simple.

Al otro lado de la ciudad de Santo Domingo, en el sector de la Lorena, calle Uyumbicho, norte de la ciudad, y en brazos de un familiar, Alexa, de once meses, asistía ingenua al funeral de su papá, Óscar.

Las infantes nunca más recibirán los cariños y cuidados de sus progenitores, quienes fueron asesinados en Colombia y cuyos cuerpos llegaron a su lugar de residencia la tarde del pasado viernes.

Mientras tanto, en el Oriente, otro niño, Justin, de cinco años, del que Óscar siempre estaba pendiente, ya no recibirá más las visitas de su amoroso padre.

Los parientes de Óscar y Katty están muy dolidos por lo que les toca atravesar a estas tres criaturitas.

Por eso, ellos se han comprometido a velar por su bienestar y amarlos tanto como sus papis lo hacían, pero son conscientes de que nadie podrá reemplazarlos a ellos.

“Yo, desde que mi hermano desapareció y desde antes, he ayudado a dar dinero para la niña...yo no la voy a dejar sola a Alexa”, dijo en un suspiro de desilusión Elvia Villacís, hermana del fallecido.

De hecho, confirmó que cumplirán el deseo de su ñaño. En cinco meses bautizarán a la chiquita, tal como él lo planificaba, aunque él será el gran ausente. “Quería una fiesta aquí mismo, una fiesta grande, y así lo haremos. Ya hablamos toda la familia y la mamá de la niña también”, precisó.

La pariente reveló que sentía mucha tristeza porque la bebita no entendía lo que pasaba, al igual que Justin. Aunque les explicaron que ya no volverían a ver a su papá, son muy pequeños para entender que su padre fue asesinado.

En casa de los Velasco Pinargote, Samanta recibe el cariño de sus abuelos y tías, mientras juega con su primos.

“Katty, adonde iba, llevaba a su hija. Era muy amorosa con ella y la cuidaba mucho... la peinaba a cada rato, le hacía cachitos. Adentro hay una cajita con un montón de moños que le tenía”, recordó su hermana, Ana Velasco, entristecida.

La pequeña y su madre eran muy unidas, por eso desde que Katty viajó a Esmeraldas, la niña preguntaba constantemente a sus parientes por el regreso de su mamita, especialmente por las noches, antes de dormirse.

Y es que a la mamá le gustaba cuidar los niños. “Cuando venía agarraba a la sobrina y la peinaba. Le decía a mi otra hermana que porqué no la arreglaba a la niña”, dijo Ana.

En las fiestas le encantaba el baile, especialmente con los más pequeños. Hasta al sobrino más chiquito lo tomaba de las manos y ella se agachaba para bailar.

Velasco recalcó que la niña extrañaría mucho a su mamá, pero que en su ausencia le darán todo el cariño y la atención que requiera. Además que la niña, que se parece a su madre, según sus familiares, es lo que les quedó de Katty en este mundo.

Funerales

“Queremos que la gente, especialmente esa que dijo que mi hermana y Óscar no estaban secuestrados, vean sus cuerpos”, recriminó Ana Velasco.

Recordó que durante el tiempo en el que no hubo noticias de la pareja recibieron poco apoyo de la gente y, más bien, se regaron comentarios negativos sobre los jóvenes secuestrados. “Ahora quiero que digan que era mentira, que estaban de paseo”, agregó con indignación.

Elvia Villacís, hermana de Óscar, coincidió en ello. Agregó que ella ha solicitado que se limpie el nombre de su hermano, ya que las declaraciones, en rueda de prensa de un jefe policial dieron cuenta de la posibilidad de que Óscar tuviera algún vínculo con Guacho.

Los cuerpos de Katty Velasco y Óscar Villacís fueron sepultados en el Cementerio General de Santo Domingo. La bóveda número 51 fue designada como última morada de los restos de la joven Katty Vanessa. En otro bloque, el espacio número 410 será para Óscar.

Antes de sus trasladados, en las viviendas de cada familia, donde fueron velados los cuerpos, se efectuaron las misas, para luego partir al camposanto.

Para las 11:00 estaba prevista la ceremonia religiosa en casa de los Velasco Pinargote, luego en caravana se trasladaban al cementerio. En el hogar de los Villacís la misa fue a las 14:00 y el sepelio se cumplió a las 16:00.

Las familias sepultaron a sus seres amados entre las personas que de verdad sienten dolor por su partida y se solidarizaron con ellos desde el principio. “La prensa es testigo de que cuando hacíamos plantones y vigilias solo estábamos familiares de la pareja. Siempre estuvimos solos”, enfatizó Elvia.

Ambas familias buscan sanar las heridas por la muerte de la pareja, pero también quieren justicia. No descansarán hasta que todo se esclarezca.