El ataque duró 25 segundos, pero para Ana (identidad protegida), el suceso perdurará en su memoria, porque no solo estuvo en riesgo su vida, sino también la del ser que lleva en vientre, pues se encuentra en la décima semana de gestación.

La joven, de 19 años, fue interceptada por un delincuente cuando esperaba a que su madre le abriera la puerta de su casa, en el sector Las Malvinas, del sur de Guayaquil, a las 21:00 del lunes 14 de febrero de 2022

Este jueves 17, por la mañana, tras realizarse exámenes médicos que comprobaban que no corría ningún riesgo de salud, la víctima contó su experiencia. “Fue terrible. Solo me dijo, por una vez, que le diera el teléfono, pero enseguida comenzó a atacarme. Ni siquiera hubiera podido sacar el teléfono”, recordó la afectada.

La víctima contó que el delincuente utilizaba un cuchillo largo, de cacha negra, que estaba “bastante afilado”, pero sus reflejos le habrían permitido reaccionar de inmediato y evitar que le ocasionara una herida profunda.

“Yo me defendí. Él me quería apuñalar en las piernas, pero hice lo posible para que no me haga daño, pero aún así terminé con algunos cortes, también en las manos”, explicó Ana.

La afectada mencionó que, al parecer, el motivo del ataque no era el robo, sino otro, porque “se notaba que quería hacerme daño. Y cuando le dije que estaba embarazada, es como que más quiso atacarme, porque hasta me dijo: con más ganas te mato”.

No obstante, los quejidos de la joven, a esa hora de la noche fueron escuchados por su mamá y un tío, quienes de inmediato se asomaron y le gritaron que la dejara, pero no lo hizo hasta que notó que un pariente de la joven corría a rescatarla.

El sujeto escapó a pie y, según la víctima, es un desconocido para ella y sus familiares. “No sabemos qué quería realmente. Algunos me han dicho que tal vez lo han visto, pero no hay quién confirme”.

Este suceso quedó grabado en un sistema de vigilancia. La víctima anhela que, con la grabación, alguien identifique al atacante.