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Diario Extra Ecuador

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¡Incendio los dejó sin casa!

Una familia de siete integrantes se quedó en la calle a consecuencia del flagelo que arrasó con todo lo que tenían.

Una familia de siete integrantes se quedó en la calle a consecuencia del flagelo que arrasó con todo lo que tenían.

Una familia de siete integrantes se quedó en la calle a consecuencia del flagelo que arrasó con todo lo que tenían.Miguel Ángel Laje / Extra

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“Nosotros solo nos dimos cuenta del humo y salimos corriendo”, dijo entre lágrimas Nancy Barreto, mientras observaba el incendio que poco a poco reducía a cenizas lo que durante 8 años fue su hogar.

La angustiada mujer todavía estaba con su ropa de dormir, pues el fuego que consumió su casa, no le tiempo a nada. No pudo rescatar sus enseres y lo único que avanzó a hacer, fue ponerse a buen recaudo y proteger a sus dos nietos menores de edad.

Moradores de la ciudadela María Teresa, en Milagro, salieron de sus casas asustados por el incendio. Temían que las llamas contaminen el resto de viviendas, pues en ese sector, la mayoría son de construcción de caña.

Otros por el contrario, arriesgando su integridad, trataban de cortar los cables de alta tensión, ya que por el fuego, literalmente se escuchaba que reventaban.

“Tiene que haber sido cortocircuito, porque en mi casa la luz se iba y venía”, comentó Máximo Andrade, uno de los moradores del sector.

Para Nancy Barreto, esa sería la única causa del incendio, pues afirma que cuando comenzó la tragedia, ella y sus nietos habían bajado a la casa de su hija Belkys Portocarrero a desayunar.

Los intentos por sofocar las llamas de los vecinos fueron en vano. A los pocos minutos llegaron los bomberos y aparte de controlar la situación, refrescaron las viviendas contiguas para evitar que corrieran con igual suerte.

El jefe del Cuerpo de Bomberos Milagro, Aurelio Herández, indicó que aparentemente se trataría de un cortocircuito, pero que los inspectores deberán hacer las pericias respectivas para determinar qué fue lo que ocurrió.

Mientras tanto, Nancy Barreto lamentaba lo sucedido, pues su esposo Santiago Anchundia había salido como todas las mañanas a trabajar como chofer y sus dos hijos de 8 y 10 años estaban en la escuela.

“Ellos no saben lo que pasó, cuando vengan mis hijos se van a poner mal. Espero que alguien me ayude porque me he quedado en la calle, solo con lo que tengo puesto”, expresó.

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