Las indagaciones de la Policía de Tumbaco determinaron que el adolescente que habría asesinado a Carlos Cruz de una puñalada en el corazón lo habría hecho por celos.

La tarde del 28 de mayo, el cuerpo de Cruz fue encontrado sin vida y lleno de sangre en el jardín de una vivienda ubicada en Tumbaco, oriente de Quito.

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Ese día la víctima bebía licor con su novia y con tres sujetos más, entre ellos el menor de edad. Este último, al parecer, estaba cortejando a la ‘pelada’ de Cruz, por lo que se formó una bronca entre los tres.

Los hombres se daban golpes mientras la chica intentaba separarlos. De pronto, el adolescente sacó un cuchillo y tenía las intenciones de apuñalar a la mujer; sin embargo, Cruz se interpuso y recibió la ‘estocada’ en su pecho.

El presunto agresor y la mujer huyeron de la propiedad, mientras que los otros panas se metieron a dormir a un departamento. La víctima permaneció por más de dos horas en el jardín hasta que llegó una inquilina y denunció el hecho.

Los policías detuvieron a los individuos que estaban pasando la borrachera en un cuarto, quienes les dieron las características del supuesto agresor.

Tras un operativo por la zona ubicaron al menor de edad deambulando por una calle. Este todavía tenía huellas de sangre en sus prendas y marcas de golpes en su rostro. La mujer por la que habría sido el ‘pito’ todavía no aparece.

El sospechoso fue aislado y será trasladado a un centro de infractores mientras se indaga el caso. Podría ser recluido hasta cinco años o recibir medidas socioeducativas.

Mientras tanto, el cuerpo de Cruz fue velado en una zona rural de Cotacachi, de donde era oriundo. Tenía 19 años.

Su familia ha solicitado a las autoridades que se castigue con el mayor peso de la ley al responsable de su muerte.

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