Con una amplia sonrisa, Matildita saluda: “¡Hi, besties!” (Hola, mejores amigos), y con sus dedos cruzados forma un corazón coreano (ademán que los más jóvenes usan).

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Matilde Lagos, de 84 años, se ha convertido en una figura entrañable en Quito. Su carisma, energía y sentido del humor la han llevado a convertirse en una sensación en redes sociales y una representante visible de varias campañas del Municipio de Quito.

Actualmente forma parte de campañas institucionales, es conocida por su participación activa en el Metro de Quito, el festival Verano de las Artes y otros programas culturales de la ciudad.

Así nació el primer video viral de Matildita en TikTok

“Me hice famosa porque soy medio loquita”, dice entre risas. Todo comenzó casi por accidente, cuando un funcionario del Patronato San José le propuso filmar un video cómico, en el que ella se le acercaba de forma coqueta a un joven y se le insinuaba. “Aquí en mi cartera tengo 84 mil dólares”, le dice al joven. Él se emociona y se van juntos, entre risas.

La grabación fue tan exitosa que motivó a crear más contenido. Desde entonces, Matilde ha participado en varias producciones digitales.

“Ella tiene una gran memoria, se aprende los guiones en minutos. Y sabe cómo manejar la cámara”, comenta Jonathan Guacollantes, o Jonathancito como ella le dice, con quien empezó a grabar los videos.

Siempre vio en ella una chispa especial que no se podía quedar solo en los talleres ocupacionales de los 60 y Piquito.

Rutina imparable: talleres, pódcast y clases de kichwa

Matilde Lagos no se detiene. Para conversar con ella hay que revisar su apretada agenda: está inscrita en talleres de guitarra intermedia, pódcast, informática, danza, idioma kichwa, corte y confección, además de que forma parte del grupo musical Voces y Guitarras.

“Soy una mujer de siete oficios y catorce necesidades”, dice con picardía. Incluso en las noches estudia o practica la guitarra, a menos que esté demasiado cansada, aunque tiene una energía que cualquier joven envidiaría.

Orgullo familiar y apoyo total de sus hijos

Matilde empezó a formar parte de los programas para adultos mayores a los 65 años, es decir, que ya tiene casi 20 años participando activamente.

Antes trabajaba como modista y ofrecía estudios bíblicos puerta a puerta. Hoy sus tres hijos la apoyan en todo. “Están contentos. Dicen que se sienten orgullosos de tener una madre así”, manifiesta.

La abuelita que domina TikTok, Instagram y el lenguaje centennial

No faltan críticas y hasta tiene ‘haters’. “Me han criticado por participar en el Pase del Niño, por ejemplo, pero yo sigo adelante”, sostiene.

Su primer video viral tiene ya 154.000 visualizaciones, más de 17.000 likes y ha sido compartido más de 3.500 veces.

Eso sí, no solo es la protagonista de los videos, sino que también sabe usar plataformas como Instagram y TikTok, donde poco a poco va ganando seguidores.

Términos como ‘green flag’, ‘la fucking vibra’, ‘iconic’, entre otros, forman parte de la jerga de la generación Z a la que Matildita se ha acoplado a la perfección.

Los miembros de dicha generación, también conocidos como centennials, son personas nacidas entre mediados de la década de los noventa y finales de la década de los 2000. Son considerados nativos digitales.

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