Nelly Pin y sus hijos, Jaico y Kristel, decidieron viajar a Manabí para pasar los cuatro días del feriado en familia. Ellos son parte de los pocos turistas que decidieron acudir a la terminal terrestre de Guayaquil para tomar los transportes que los lleven a sus lugares de destino.

Pero la afluencia de viajeros fue irregular en comparación para otros años, aseguró Miguel Medina, trabajador de una de las cooperativas de transporte que viaja a General Villamil (Playas).

“Este año no hemos doblado turnos, solo se realizan rutas normales. Tampoco hubo necesidad de incrementar unidades”, señaló José Pérez, conductor de una cooperativa que viaja a Esmeraldas.

Ambos trabajadores del área de transporte coincidieron en que las restricciones, el temor a enfermarse y la economía ‘en bajas’ habrían impedido la gran afluencia de turistas.

Por otra parte, los comerciantes de la terminal terrestre aseguraron que sus clientes han disminuido en un 50 a 60 por ciento.

“No se ven muchas personas como en otros años, esperemos que la situación mejore en los siguientes días”, indicó David Jiménez.

Los turistas consultados manifestaron que viajarán a lugares de poca afluencia de personas, es lo que confirmó Nelly Pin, quien dijo que visitará a sus padres que viven en una parroquia rural del cantón 24 de Mayo, en Manabí.

“En el campo el aire es limpio. Ni por broma iré a la playa”, agregó Nelly.

Mediante un comunicado la terminal terrestre de Guayaquil afirmó que los buses son sanitizados antes de que los pasajeros suban y que las cooperativas tienen la obligación de tomar la temperatura a los turistas, además de otras medidas de bioseguridad.