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Leandro Norero le contaba a Salcedo que él sanaba a personas a través del Espíritu Santo

En los chats divulgados por la Fiscalía, ambos coinciden que la ambición por el dinero los cambió

Norero y Salcedo habrían tenido conversaciones, según la Fiscalía.
Norero y Salcedo habrían tenido conversaciones en chats, según la Fiscalía.Cortesía

Los chats publicados por la Fiscalía General del Estado no solo han expuesto como funcionarios públicos, políticos y periodistas tenían línea directa con el crimen organizado. También detallan el antes y después de dos de los implicados, que no solo eran parte del caso Metástasis, sino también fueron investigados por tráfico de drogas y por ingresar objetos irregulares a uno de los centros de privación de libertad.

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En esta ocasión, una conversación entre el narcotraficante Leandro Norero (+) y Daniel Salcedo, quienes según la información proporcionada por Fiscalía interactuaban en el chat con el usuario Owner y Bellito, respectivamente, detallan las acciones que realizaban cuando acudían a la iglesia. Esto, mucho antes de estar envueltos en procesos judiciales: “Ñaño, yo llegué a ministrar y a sanar personas por medio del Espíritu Santo. Mi vida es un gran testimonio”, le contó Norero a Salcedo, el 16 de julio de 2022.

Salcedo, quien actualmente es buscado por la justicia, por el caso Metástasis, respondió: “¿Qué? ¿A sanar? Chuta, súper”. Y llegó a una conclusión inmediata: “El dinero te cambió, lo mismo que me pasó. Eso nos friega”. Un comentario con el que estuvo de acuerdo, según las conversaciones, Norero: “Ñaño, fue el dinero. Yo vengo desde abajo”.

Salcedo continuó el chat y replica aquella justificación de Norero: “Lo mismo yo, hijo de un pastor, toda la vida en una iglesia. Era de bajos recursos. Cuando tuve, me volví loco”.

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Ciertos favores

Según los chats publicados por el Ministerio Público, Salcedo y el Patrón Norero intercambiaban información y se hacían favores, pese a estar recluidos.

Salcedo le pidió ayuda en varias ocasiones a Norero para conseguir información sobre su hermano, Noé, quien había sido trasladado desde la cárcel, donde cumplía sentencia por el delito de lavado de activos, en la compra y venta de insumos médicos, en la pandemia, a un hospital para ser intervenido quirúrgicamente.

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Norero consiguió información sobre su estado de salud y también le daba detalles de lo que sucedía en la casa médica. “Ahí está con la familia, en la habitación”.

Salcedo también le pidió ayuda para que las autoridades no procesen a dos mujeres que habrían ingresado a la habitación del hospital donde se encontraba su hermano para entregarle dinero. “Ñaño, ayúdame. Dicen que las tienen ahí y que si no, el mayor da luz verde para hacerles hue...”.

El Patrón, tan solo minutos después de enterarse de lo sucedido, respondió: “Es un teniente Redima que tiene a las peladas. No las van a procesar, solo les van a levantar un parte”. Luego añadió, como un comentario sobre el trabajo que realizaban los agentes: “esos pacos se quieren meter a la cárcel a raquetear, ya les estamos parando el carro”.

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