La calle principal del barrio Divino Niño, sur de Quito, se ha convertido en un peligro para los moradores, pues un deslizamiento de tierra se hace cada vez más profundo con las recientes lluvias.

Luis Asimbaya, uno de los moradores, prefiere no acercarse a la vereda que ya está rota por el derrumbe. “Esto está así, siquiera, unos dos años, pero en las últimas semanas se ha puesto peor”, indicó.

El talud ha avanzado hasta las construcciones, al menos cinco metros, por lo que ya se ve parte del sistema de alcantarillado. Algo que preocupa aún más a los moradores.

“Imagine si se termina de derrumbar, con el peso de las casas se puede colapsar la tubería y nos llenamos de aguas servidas”, dijo Jaime Bohórquez, otro morador.

Según los vecinos, no se terminó de construir el muro de contención como se tenía previsto. Es por eso que el derrumbe se evidencia justo al lado de la infraestructura de hormigón.

Más temor

Pero ese no es el único miedo al que se enfrentan. Unos 300 metros más arriba del primer talud hay otro que, aunque ya no amenaza el sistema de agua potable, sigue siendo un ‘enemigo’ latente.

Son aproximadamente 80 metros de ladera que, cuando llueve, han caído sobre algunos autos. “Si se ve algo de tierra acumulada donde debería haber vereda es porque nosotros hemos limpiado”, contó Mónica Villagómez, habitante del bloque que queda frente al talud.

Hace poco más de un año se cambiaron las tuberías del servicio de agua potable, pues estaban en peligro de colapsar. “Ahora están bajo el adoquinado, pero la montaña se sigue cayendo”, agregó la vecina.

Allí, los moradores colocaron unos palos como medida desesperada para contener la caída de tierra. No ha funcionado del todo.

“El barrio está en una ladera, por lo que primero se debieron prever los muros de contención necesarios por la seguridad de todos”, explicó Villagómez.

Para Asimbaya, el temporal de lluvias que ya ha ocasionado estragos, como en Guayllabamba, debería ser un aviso de que las intervenciones son urgentes.

EXTRA solicitó una entrevista con un vocero de la Administración Zonal de Quitumbe, pero en el departamento de comunicación no hubo respuesta. El barrio pertenece a esta jurisdicción.

Desde la Empresa Metropolitana de Seguridad informaron que es esa administración la responsable de hacer los requerimientos para mantenimientos de taludes.