Su ‘Bolón’ se emocionaba al escuchar los aviones

Milagro (Guayas)
El humo que emana del fósforo recién encendido le cubre el rostro y agudiza el llanto de Zoila Lozano. Sus manos temblorosas intentan encender una vela que coloca delante de la fotografía de su hijo Luis Ramírez Lozano. El cirio ilumina el improvisado altar que levantó ayer en honor a su ‘Bolón’, como conocía de cariño al marino, uno de los 22 fallecidos en el trágico accidente aviatorio ocurrido el pasado martes en Pastaza.
La adolorida madre regresa en el tiempo y recuerda a su niño “bastante gordito” corriendo por las calles del barrio Los Chirijos, al norte del cantón Milagro, y explica que por eso los vecinos le pusieron aquel apelativo que siempre conservó, hasta convertirse en adulto.