La lluvia causó fuertes estragos en Quito la tarde del 31 de julio de 2022. Varios sectores se vieron afectados por el aguacero. Algunas zonas de Calderón, Pomasqui, Santa Clara del Común y Llano Grande, en el norte de la capital, quedaron inundadas y, al menos, una veintena de casas sufrieron daños.

Pomasqui y Santa Clara del Común fueron los puntos más afectados. El desbordamiento de una quebrada habría ocasionado los daños en las viviendas. Vecinos denunciaron en redes sociales que el aguacero dejó una gran ola de lodo que entró a las casas y bloqueó varias calles.

Al momento, el Municipio evalúa la situación. Fredy Nieto, director metropolitano de Gestión de Riesgos detalló que "hay unas 20 viviendas afectadas” y que para apoyar a las familias damnificadas se han activado alojamientos temporales.

Adicionalmente, equipos de salud física y mental atienden a los damnificados, mientras que las maquinarias y las brigadas municipales retiran los escombros de las vías bloqueadas. La tormenta dejó sin energía eléctrica a varias familias por lo que también se trabaja para restablecer el servicio.

En la urbanización El Rosario, los residentes cuentan que no es la primera vez que son víctimas del temporal. En 2019, un mar de lodo y piedras arrasó hasta con los vehículos de los vecinos. En esa ocasión varías mascotas murieron.