La amenaza de muerte, que pesaba desde hace tres meses sobre Alejandro Franklin Alvear Vera, se cumplió la mañana de este domingo 5 de junio. Dos hombres llegaron en una motocicleta, uno de ellos se bajó y le propinó siete tiros.

Este delito, con el que ya suman 599 las muertes violentas registradas en la Zona 8, conformada por Guayaquil, Durán y Samborondón, ocurrió a las 09:50 en la cooperativa Justicia Social, en el sector Los Rosales, en el norte de Guayaquil.

La víctima, de 30 años, desde hace un mes vendía jugos en una carreta. Las naranjas con las que los preparaba quedaron regadas en la vereda, a un costado de su cuerpo, el cual estaba bañado en sangre.

Sus familiares llegaron hasta el sitio. Allí protagonizaron escenas de dolor y llanto, incluso cruzaron la cinta de seguridad puesta por los policías para acercarse a su ser querido.

“Estuvo detenido hace siete meses porque lo encontraron con sustancias. Todos les advertimos que ya dejara esto, le habíamos dicho que algo así podía pasarle, pero él no nos hizo caso y continuó en lo mismo. Trató de cambiar y por eso se cambió de vivienda, se vino a vivir al norte”, contó un pariente.

“Esto le pasó por necio, ya lo habían amenazado de muerte y le decíamos que se quede en casa”, agregó.

El coronel Hugo Silva, subcomandante de la Zona 8 de Policía, informó que la víctima registraba antecedentes penales por tráfico de droga.

La noche del sábado 4 de junio, en el Puerto Principal, se registraron otros dos crímenes. En bloque 9 de Flor de Bastión (noroeste) fue asesinado Álex Navas Rosas.

Mientras que en las calles 49 y Rosendo Avilés, en el suroeste, sicarios acabaron con la vida de Michael Pazmiño Muñoz. (AEB)