Un incendio en una fábrica recicladora desnudó el descontento de los moradores del barrio Vilcabamba, en Calderón, norte de Quito. Con el hecho, la gente quiere que la empresa se vaya definitivamente del lugar.

Ayer, a las 06:15, una parte del material que se usa para hacer bolitas de polietileno se destruyó. Las llamaradas alcanzaban, al menos, los tres metros de alto.

“Un vecino nos alertó sobre el fuego. Poco a poco mi casa empezó a llenarse de humo y nos fuimos a la sala como precaución”, relató Santiago Vizcaíno, morador del conjunto.

Los trabajadores de la empresa intentaron aplacar el fuego. No lo consiguieron. Llamaron a los miembros de los bomberos y 27 uniformados controlaron el suceso, luego de una hora.

Las denuncias

Con los ánimos calmados, las personas se reunieron afuera de la empresa para constatar los daños. Para ellos han sido cinco años de molestias, ya que desde adentro se desprende un olor insoportable, aseguran.

Incluso, se vieron obligados a presentar denuncias desde julio del año pasado. Lo hicieron en la Secretaría del Ambiente así como en la Agencia Metropolitana de Control.

Piden que las instalaciones sean reubicadas. “Nuestra salud corre mucho riesgo”, pregonó Galo Mora, otro habitante molesto.

Sin embargo, Marlon Ordóñez, administrador del lugar, detalló que los gases que se emanan no serían nocivos. Además, ellos han estado en ese sitio por 20 años. Para funcionar, cuentan con todos los permisos, aseguró.

“El humo se genera cuando procesamos el material para convertirlo en pepitas plásticas”, precisó. Dijo que tienen previsto cambiarse a otro terreno. Pero no es de la noche a la mañana, indicó. Estima que el traslado tomaría un año... si no es más.