C onocida como ‘la fruta de la pasión’, la maracuyá ha conquistado los mercados de Europa y Estados Unidos por lo concentrado de su sabor ácido que en estos lugares lo consideran como ‘exótico’. Originaria de Sudamérica, en Ecuador se la cultiva en la zona tropical del Guayas, Los Ríos, Manabí y Esmeraldas, tiene una alta demanda en Países Bajos.

“Es muy refrescante y de fácil consumo, rica en antioxidantes y nutrientes, por lo que es adecuada para todas la edades, desde niños hasta adultos mayores. Por ser rica en fibra mejora el tránsito intestinal y reduce el riesgo de ciertas alteraciones y enfermedades”, explica la chef Vanessa Flores.

Esta fruta es rica en vitamina A y betacaroteno, por lo que protege los ojos y es muy importante para la salud de la piel. Evidentemente es amiga de la dieta, baja en calorías y por tanto apta para cualquier tipo de régimen alimenticio, así como para deportistas, mujeres embarazadas o madres lactantes.

Se consume fresca, simplemente basta con cortar en dos partes la fruta con la ayuda de un cuchillo y comerla con una cucharita. En su interior se encuentra su pulpa gelatinosa, amarilla y llena de semillas o pepitas como las conocemos comúnmente, son fáciles de comer y no es necesario quitarlas, aunque eso depende del gusto de cada cual.

La pulpa es la base de muchas recetas, ideal para preparar cocteles, jugos, batidos y sorbetes, así como también es muy apreciada en la repostería en donde hoy en día se utiliza en la preparación de una amplia y extensa variedad de deliciosos postres como mermeladas, cremas, helados, tortas, mousses y salsas. "Su sabor es tan versátil que combina casi con todo, especialmente con el chocolate y el coco", asegura la chef.

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Actualmente la maracuyá es muy apetecida para la elaboración de platos salados. Gracias a su original sabor entre dulce y ácido y sobre todo por ser una fruta muy aromática y deliciosa se convierte en una opción ideal para combinarla con carnes, pescados, mariscos y quesos.

Tips

-Cuando la fruta está madura se la puede almacenar en el refrigerador hasta por una semana y la pulpa congelarla hasta por tres meses, siempre sellada herméticamente.

-Una maracuyá no está apta para el consumo cuando está verde y su piel demasiado dura. Tardará en madurar entre 3 y 5 días a temperatura ambiente.

-Si vas a comprar maracuyá es importante que te fijes en que se sienta firme y pesada en relación a su tamaño.

Garbanzo, la estrella de Oriente

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