Paloval, Guayaquil
Ayer por la tarde el Ídolo no solo ganó sino que gustó y goleó. Y eso le agrada a la gente, más aún a la que va al Monumental y paga su entrada.
Venían los ‘toreros’ de una semana con sendas derrotas. Había perdido con Católica en Quito (0-1) y con Liga de Portoviejo en la capital manabita por 0-3. Hubo reacciones dirigenciales y hasta una fuerte llamada de atención del vicepresidente del club, Alfaro Moreno.
Ayer las cosas se presentaron distintas, pese a que la cancha estaba resbalosa por los aguaceros caídos durante estos días en Guayaquil. Asimismo, el rival de los ‘amarillos’, la SD Aucas, no le hizo ni ‘cosquillas’ por cuanto presentó pocas propuestas ofensivas.

ABRIÓ ÁLVEZ
Los ‘toreros’ entraron con todo para abrir el marcador. Estuvieron cerca de hacerlo al minuto 9, cuando un buen pase de Díaz a Cristian Penilla por poco terminaba en gol, pero hubo una eficiente participación del arquero del ‘Papá’, Blázquez.
A partir del minuto 20, el uruguayo Álvez se cambia de botines. Los que tenía no lo hacían correr eficazmente. Se resbalaba a cada rato.
Y aquello dio resultado. Al minuto 28 ese mismo Álvez decretó una jugada que empezó Penilla, el mismo que se desprendió ante la marca ‘auquista’ para habilitar a Esterilla, quien sin ‘mezquindad’ le entregó la bola a Álvez para que convirtiera una anotación con un fuerte derechazo, difícil para Blázquez. La celebración del ‘charrúa’ con el argentino Díaz fue graciosa. Ambos chocaron sus cabezas.
El Ídolo le tomó el ‘pulso’ al partido. La gente, que por cierto es exigente, pedía más goles. Y vino la segunda conquista al minuto 35, un tanto que cayó como ‘anillo al dedo’.
Nuevamente, tras una jugada de ‘laboratorio’ que comenzó Richard Calderón, quien se desprendió de los defensores ‘auquistas’ para entregarle la bola a Álvez, quien dentro del área remató, pero el balón se estrelló en la humanidad del zaguero Carcelén. El rebote fue aprovechado por Ely Esterilla, que corrió por el carril izquierdo y definió sin problemas.
Algarabía en el Monumental. La hinchada, presente en la cancha, ‘olía’ una goleada.
La primera parte finalizó 2-0 y ya para la complementaria vinieron otras novedades.

PENALTIS FALLIDOS
En el segundo tiempo del compromiso se cobraron 2 penaltis, pero lo más extraño es que fueron errados. El primero aconteció al minuto 73, cuando Carcelén le cometió una falta dentro del área a Richard Calderón. Cartulina amarilla para Carcelén. Frente al punto fatídico se paró Álvez y cuando la gente se aprestaba a gritar un nuevo gol del ‘charrúa’, este lo cobró mal y desembocó en el lucimiento de Blázquez, quien atinó en el disparo.
Seis minutos más tarde (79) Banguera no se quedó atrás y atrapó un tiro desde los 11 metros, ejecutado por Salaberry. La falta la cometió el arquero amarillo a Castillo. En un principio, el árbitro José Luis Espinel dudó; pero luego rectificó gracias a la ayuda de su asistente Ricardo Baren.
Un minuto después (81), Barcelona aprovechó un contragolpe. Lo comandó Álvez, quien hizo un ‘carrerón’ por la zona derecha. Quiso reconciliarse con la hinchada y así fue. Puso un ‘pase gol’ a Cristian Penilla que este concretó sin problemas; convirtiéndose desde anoche en el goleador del torneo con 4 dianas.
Un cotejo con varias acciones distintas, pero con un Barcelona que aprovechó la debilidad del rival.