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Deudas como comprar una vivienda pueden ser positivas, de acuerdo con especialistas.Freepik

Deuda buena vs deuda mala: cómo distinguirlas y evitar errores financieros

Expertos advierten que el problema no es endeudarse, sino hacerlo sin estrategia. Hay cerca de 1.6 millones de morosos en Ecuador

Por Redacción EXTRA

29 de octubre, 2025

No toda deuda es pecado. Bien manejada, puede ser el trampolín que nos impulse hacia metas más grandes. Pero ojo, no todas las obligaciones nacen iguales. Algunas nos empujan hacia adelante; otras nos atan, mes tras mes. La clave, simple: diferenciar entre las buenas y las malas.

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La deuda buena, como la define el coach en finanzas personales Roberto Orellana, es aquella que está alineada con un propósito claro y que promete un retorno tangible a mediano o largo plazo. En estos casos, se utiliza la deuda como palanca financiera para crecer, siempre que las condiciones sean favorables.

Pero no todas encajan en ese molde. La deuda mala aparece cuando nos endeudamos sin una planificación clara, cuando tomamos obligaciones para gasto inmediato (ropa, gadgets, salidas) sin prever cómo las vamos a saldar.

Sonia Vélez, experta en finanzas, explica que este tipo de fiados “no aportan a nuestro crecimiento, no están planificadas y terminan impactando negativamente en nuestro estilo de vida”. Estas obligaciones pueden restarte estabilidad y empujarte a gastar más de lo que puedes pagar cómodamente.

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En Ecuador, la realidad financiera de muchas personas refleja que este desequilibrio es común. De hecho, según un informe reciente de la Red de Instituciones Financieras, un ecuatoriano promedio mantiene entre 8 y 13 deudas distintas simultáneas con entidades financieras.

Orellana insiste en algo vital: un fondo de emergencia que cubra de 3 a 6 meses de gastos básicos es la línea de defensa más eficaz ante imprevistos. Si no lo tienes, cualquier eventualidad (una enfermedad, una reparación grande, pérdida de empleo), puede ‘ahogarte’ en deudas.