Una denuncia pública encendió las alertas sobre una nueva modalidad de robo que estaría ocurriendo incluso en hoteles de alta categoría en la capital. 

El periodista ecuatoriano Galo Arellano denunció en su cuenta de X que su madre habría sido víctima de un robo mientras desayunaba en el buffet de un hotel de cuatro estrellas ubicado en la zona financiera del norte de la ciudad, cerca de la intersección de la Avenida Naciones Unidas y Los Shyris.

Según relató Arellano, su familia acudió al área de buffet del hotel y, en un descuido, cuando los comensales se levantaron de sus asientos para servirse alimentos, su madre se percató de que su cartera había desaparecido. Tras alertar al personal, se revisaron las cámaras de seguridad del lugar.

De acuerdo con el testimonio del periodista, el propio hotel habría reconocido que un hombre sustrajo la cartera a plena luz del día, frente a varias personas. Sin embargo, en el hecho habrían participado al menos tres individuos, quienes actuaban de manera organizada y luego se retiraron del lugar sin ser interceptados.

Tras el robo, la víctima procedió a cancelar sus tarjetas bancarias y presentó la denuncia correspondiente ante la Fiscalía General del Estado. No obstante, pese a la rapidez con la que se actuó, los delincuentes habrían logrado realizar consumos inmediatos en licorerías y otros locales, generando un perjuicio económico de 350 dólares.

Crítica a las autoridades

Arellano también cuestionó la respuesta del hotel. Indicó que el establecimiento no habría facilitado los videos de seguridad y que únicamente entregaron 200 dólares por el celular robado, argumentando que, al no existir factura del dispositivo, no podían reconocer un valor mayor. 

Además, señaló que a su madre le hicieron firmar un documento comprometiéndose a no iniciar acciones legales.

En su publicación, el comunicador calificó el hecho como “alarmante” y advirtió sobre el nivel de inseguridad que se vive en el país, señalando que resulta “imperdonable” que un hotel de esta categoría no cuente con los controles necesarios para garantizar la seguridad de sus huéspedes.

Finalmente, Arellano hizo un llamado de advertencia a los ciudadanos y turistas que acuden a este tipo de establecimientos, recomendando no dejar pertenencias sin supervisión, portar únicamente objetos indispensables y cancelar de inmediato las tarjetas ante cualquier sospecha de robo. 

El caso fue expuesto etiquetando a entidades como la Policía Nacional, AHOTEC y Turismo Ecuador.

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