“Pido a las autoridades que investiguen el crimen de mi hijo. Él no le hacía mal a nadie ni tenía problemas con nadie. No sé qué pasó, nunca pensé vivir este duro momento”, con estas palabras Jenny Castro, ayer trataba de reponerse de la inesperada partida de su hijo Paulino Ismael Guadamud Castro, de 22 años, quien fue acribillado la tarde del viernes 7 de noviembre, a 100 metros del redondel de ingreso al cantón Palestina, provincia del Guayas.

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La víctima, que conducía una motocicleta en la que transportaba dos sacos de yute con paja, fue sorprendida por sujetos armados que le cerraron el paso y le dispararon en repetidas ocasiones. Recibió al menos una decena de impactos en la cabeza y espalda, lo que provocó que perdiera el control del vehículo y cayera a una cuneta del lado derecho de la vía, donde quedó sin vida junto a la moto y los sacos. Tras el ataque, los gatilleros huyeron con rumbo desconocido.

Agentes de la Unidad de Muertes Violentas (Dinased ) y Criminalística hasta el mediodía de ayer realizan pericias en la vía a Palestina para determinar si los asesinos escaparon en moto o en automóvil. La zona, poco transitada, se convirtió en el escenario perfecto para el crimen, pues no hubo testigos presenciales. El hecho ocurrió a unos 800 metros del recinto Coloradal, donde residía la víctima con su madre y tres hermanas. Era el único hijo varón de la familia.

Guadamud se dedicaba desde hace una década a trabajos de soldadura en su comunidad. Tras la muerte de su padre, hace más de un año, ayudaba económicamente a su madre; además, era soltero.

Jenny Castro relató a EXTRA que su hijo trasladaba la paja desde las orillas del río Daule hasta el recinto Coloradal, ya que cuidaba los caballos de un amigo. “La inseguridad está terrible en nuestra zona, ya son varios los crímenes en esta vía. La motocicleta que manejaba era de mi yerno. Ahora quedamos desamparadas, él era quien llevaba el sustento a la casa”, lamentó.

El teniente Marcos Gallegos Espinoza, de la Policía de Palestina, informó que en el sitio se hallaron cinco casquillos percutidos de calibre 9 milímetros. “Estamos investigando la motivación de este hecho violento”, dijo el oficial.

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