La tarde de este lunes 6 de octubre se registraron enfrentamientos entre habitantes de Alausí (Chimborazo), en el contexto del paro convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie).

Un grupo de ciudadanos se había autoconvocado para marchar por la seguridad, el derecho al trabajo y la libre movilidad. Con palas y herramientas intentaron limpiar los obstáculos colocados en las calles por comuneros de las comunidades altas del cantón.

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“Estamos cansados, necesitamos trabajar, estamos encerrados aquí. Está cerrado por el norte y el sur. No nos llega nada. ¿Acaso no somos ecuatorianos? ¿No tenemos derechos?”, expresó uno de los marchantes que participaba en la movilización ciudadana.

El punto más tenso se vivió cuando el grupo avanzó hasta la carretera Panamericana, donde otro grupo de manifestantes resguardaba un montículo de tierra. “Si no se baja el decreto, aquí no hay nada. Esto es para todos, tienen que unirse”, gritaban algunos.

¿Qué pedían los manifestantes en Alausí?

Los ciudadanos, en su mayoría de la cabecera cantonal, pedían dialogar con los dirigentes, pero estos no se encontraban en el sitio. Los ánimos se caldearon rápidamente: algunos encendieron llantas y comenzaron los cruces de palabras. En pocos minutos, el intercambio verbal derivó en agresiones con piedras.

El Cuerpo de Bomberos de Alausí intervino a distancia para apagar las llamas, mientras las piedras seguían cayendo. Ninguno de los grupos se dispersó; ambos permanecieron en el lugar, en una tensa confrontación que refleja el agotamiento y la frustración que vive el cantón.

Desde que inició el paro, los bloqueos en Alausí no se han levantado. Ningún convoy ha logrado ingresar y el tránsito hacia las comunidades continúa cerrado. Hasta el momento, solo ha podido llegar al sitio Marlon Vargas, presidente de la Conaie, acompañado de otros dirigentes. Incluso el alcalde Remigio Roldán, también intervino en la visita y dio el apoyo a los manifestantes.

Quienes desean salir deben hacerlo a pie. El domingo, varios comuneros que intentaron ingresar a la ciudad con productos fueron retenidos y la hierba que llevaban para alimentar a sus animales fue tirada. En las marchas, además, los comerciantes denuncian que se les obliga a cerrar sus locales, lo que agrava aún más la paralización de la actividad económica en el cantón.

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