En la parroquia La Unión, en el cantón Quinindé, provincia de Esmeraldas, el nombre Publio Jefferson Caicedo Valencia quedó repentinamente inscrito en la lista de líderes sociales caídos por la violencia en la población.

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El hombre de 63 años, dirigente del recinto El Tambo, fue asesinado a las 20:00 del sábado 6 de septiembre de 2025. Él se encontraba fuera de su casa y desde una camioneta le dispararon, al estilo sicariato.

Gravemente herido, fue auxiliado por sus familiares y trasladado en una ambulancia del Cuerpo de Bomberos de La Unión hasta el hospital Alberto Buffoni, en el cantón Quinindé, donde la doctora de turno confirmó que había llegado sin signos vitales.

Para pobladores de El Tambo, Publio fue la voz que durante años reclamó por obras. “No solo luchó por agua potable, sino por todo el recinto. Siempre fue la cabeza principal, el que nos guiaba y no se cansaba de tocar puertas”, recordó Gilbert Bautista, vecino.

"Su muerte es como un balde de agua caliente para nosotros. Se ha perdido a uno de los principales líderes de la comunidad, el que conseguía lo que se buscaba", lamentó Bautista mientras acompañaba el velorio en El Tambo. Allí, entre lágrimas y oraciones, hombres y mujeres recordaban anécdotas de las jornadas de gestión comunitaria que lideró Publio.

Impotencia en su familia y vecinos

El dolor de la viuda, Martina Aurelina Quiñónez, y sus hijos reflejaba también la impotencia de toda una comunidad que, tras décadas de lucha junto a Publio, ahora se queda huérfana de liderazgo. El crimen ha generado indignación entre líderes barriales y comunitarios de la zona, quienes ven en este hecho no solo la pérdida de un dirigente, sino el golpe directo a las bases de la organización social en La Unión y sus recintos vecinos.

La trayectoria de Publio como dirigente comunitario se extendió por más de década y media. Sus vecinos lo recuerdan recorriendo las calles polvorientas para convocar reuniones, organizando mingas, recogiendo firmas y gestionando proyectos ante las autoridades. Gracias a su insistencia, en El Tambo llegó el alumbrado eléctrico hace apenas cuatro años.

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