La industria televisiva ecuatoriana recuerda este, 12 de diciembre de 2025, el primer año de la muerte de la actriz Amparo Guillén, una de las figuras más queridas de la pantalla nacional gracias a su inolvidable interpretación de Lupita en la serie Mis adorables entenados. Su fallecimiento, ocurrido la mañana del 12 de diciembre de 2024, fue dado a conocer en primicia por EXTRA pues la actriz, de 70 años, tenía pactada una entrevista con este Diario, cita que nunca llegó a concretarse.

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A un año de su partida, el recuerdo de Amparo Guillén se mantiene vivo entre quienes compartieron con ella trabajo, amistad y afecto. Parte de su círculo más cercano conversó nuevamente con EXTRA para evocar a la mujer detrás del personaje que marcó a generaciones.

“Luego de un año, es difícil no sentir que la vida cumplió con el única de las justas promesas que se cumplirá un día, esta fue de la tu partida y hoy tu falta se siente en nuestro corazón tu que fuiste compañera madre y amiga”, expresó Andrés Garzón, con la voz entrecortada al recordarla. Con él trabajó por muchos años y fue parte del elenco de Mis adorables entenados. 

Otro de los actores que trabajó con ella, Oswaldo Segura, reconoce que aún le cuesta aceptar que ha pasado un año desde su muerte. “Vivirá por siempre con nosotros, con los actores, con los personajes, porque fue Lupita y Amparito. Como Lupita, amamos su personaje, y no solo nosotros, sino todo un país. Va a ser difícil que la gente la olvide, porque ella brindó lo mejor que tenía desde su corazón, su bondad para sus hijos, que no eran sus hijos, eran sus entenados, a quienes amó como si los hubiera traído al mundo", comentó.

El actor añade que lo que más destaca de la intérprete es la nobleza que transmitía dentro y fuera de la pantalla. “Su corazón de madre abnegada ama a su gente, a su país, y eso es lindo. Amar su país significa amar sus regiones, sus costumbres, su gente. Como Amparito, nosotros los actores la recordamos mucho como compañera, por eso siempre estará con nosotros”, añadió.

¿Qué le pasó a Amparo Guillén?

El fallecimiento de Guillén ocurrió en medio de un momento familiar especialmente difícil. La noche del 2 de diciembre de 2024, en el barrio Olímpico, al sur de Cali, Colombia, un hombre de aproximadamente 35 años fue sacado gravemente herido de un motel de la zona. Según las investigaciones, la víctima había llegado con dos sujetos y una mujer en un taxi. Mientras la mujer y uno de los hombres se encontraban en la recepción del establecimiento, los otros dos permanecieron en el parqueadero, donde estalló una disputa.

“Hay dos que se quedan atrás, pero comienzan a tener una discusión entre ellos, una pelea y ahí se armó una violenta confrontación que terminó mal. La víctima queda ahí y luego es llevada a un centro asistencial”, relató a EXTRA uno de los investigadores del caso en ese entonces.

Esa víctima era Roberto Ávila, hijo menor de Amparo Guillén. El joven permaneció 12 días internado en una clínica, pero murió el 14 de diciembre, al mediodía, debido a severos traumas craneoencefálicos.

Dos días antes del fallecimiento de Roberto, Amparo sufrió un infarto en esa misma ciudad colombiana, adonde había viajado para acompañar a su hijo durante su hospitalización. Su salud no resistió el impacto emocional y físico de aquellos días.

Roberto, quien había recuperado su libertad en febrero de 2024 luego de cumplir una sentencia relacionada con tráfico de sustancias sujetas a fiscalización en Ecuador, enfrentaba un proceso de reintegración social que lamentablemente quedó truncado.

A un año de la partida de la actriz, colegas y seguidores no solo recuerdan su trayectoria artística, sino también la calidez humana que la convirtió en un referente afectivo dentro del espectáculo ecuatoriano. Su legado continúa resonando en quienes crecieron con sus personajes y en aquellos que tuvieron la oportunidad de conocerla fuera de cámaras.

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