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Guayaquil

En el exterior de la casa aún permanecen mensajes bíblicos; el perrito Koffi fue cubierto con una sábana.AEB/ EXTRA y cortesía

Sobreviviente cuenta cómo ocurrió el ataque en que perdió a su familia en Guayaquil

Los baleados eran evangélicos. Hipótesis apuntan a extorsiones o a un atentado dirigido a uno de ellos. También mataron a Koffi, mascota de la familia

Quince minutos antes de la matanza que acabó con la vida de sus padres, su único hermano y hasta de su mascota, Melanie compartió una merienda con ellos. Luego se retiró a su vivienda, ubicada en diagonal con respecto a la casa donde sus progenitores residieron durante 25 años, en la ciudadela Rotario, sector de Monte Sinaí, noroeste de Guayaquil.

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Ella descansaba en su cama cuando escuchó los golpes que los delincuentes daban al candado colocado en el cerramiento, una protección improvisada por los moradores, con la intención de ingresar al lugar y ejecutar a las tres víctimas.

El crimen de Aida del Carmen Jiménez Vera, de 61 años; Marco Antonio Rosero López, de 63; y su hijo James Marcos Rosero Jiménez, de 28, se registró alrededor de las 00:30 del miércoles 3 de septiembre.

"Estaba en mi casa cuando escuché los disparos. Creí que eran policías intentando entrar. Jamás pensé que era contra mi familia”.hija y hermana de las víctimas

Los victimados eran cristianos evangélicos. En la puerta de ingreso y en la pared frontal de la casa aún permanecen mensajes bíblicos escritos por la familia: “El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente” y “La sangre de Cristo tiene poder”.

Los delincuentes rompieron el candado del cerramiento para ingresar a la vivienda.CHRISTIAN VINUEZA

La sobreviviente relató entre lágrimas que desconoce las razones del brutal ataque que segó la vida de su padre, comerciante de zapatos y correas; de su madre, quien se dedicaba a pintar uñas; y de su hermano, que vendía arroz.

“Esa noche habíamos merendado juntos. Yo me retiré minutos antes a mi casa y fue a las doce y media cuando escuché los disparos. Oía cómo intentaban abrir, cómo golpeaban para entrar al sector. Cuando se fueron, llamé por teléfono a mi mamá y como no contestaba salí a ver si estaban bien. Entonces me di cuenta de que eran ellos, mis familiares, los asesinados. ¡Dios, dame fuerza para soportar este dolor y la dirección para saber qué hacer!”, expresó.

Ella sabía que algunos vecinos habían abandonado sus casas por amenazas, pero aseguró que desconocía si sus padres y su hermano habían recibido advertencias o panfletos extorsivos de criminales.

La mascota de la familia también fue asesinada.CHRISTIAN VINUEZA

Muerte selectiva

El teniente coronel Roberto Pastor, jefe del distrito Nueva Prosperina, la jurisdicción con más asesinatos en la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón) y del país, indicó que se trató de una muerte selectiva (dirigida a personas específicas).

“Los causantes ingresaron directamente a esa vivienda. Este joven de 28 años no vivía ahí, solo estaba de visita. Sus padres son víctimas colaterales, lamentablemente. (Los asesinos) Llegaron en motos”, explicó.

El oficial detalló que en el sitio se encontraron indicios balísticos de fusiles y pistolas. “Presumimos que una estructura criminal intenta retomar el control de ese territorio”, manifestó.

Otra fuente policial informó a EXTRA que en las dos habitaciones de la vivienda hallaron los tres cuerpos y que, según moradores, James Rosero habría pertenecido a un grupo de delincuencia organizada, lo que refuerza la hipótesis de que el ataque iba dirigido hacia él.

Sin embargo, vecinos le contaron a este Diario que varias familias han abandonado sus casas debido a las constantes extorsiones. “Nos cobraban 100 dólares como cuota inicial y luego 10 dólares semanales. No sabemos si esta fue la razón del ataque contra nuestros vecinos”, declaró un habitante. 

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