Cartas al Director

Las elecciones peruanas

Anticipándose Al resultado final de las elecciones en Perú, encuestadoras y partidarios de uno de los dos candidatos difundieron números sin reflejar la realidad, dando un triunfo aún sin confirmar.
  La campaña electoral transcurrió como si el candidato fuera el expresidente Fujimori, encarcelado por una sentencia que lo condenó a 25 años de prisión. Poco de lo que se decía en la campaña se refería a la candidata Keiko, y mucho giraba en relación con los gobiernos de su padre en los cuales ella solo fue primera dama y no tuvo mayor injerencia en la administración de su progenitor; pero le asignaron los errores paternos y  graves hechos de violencia y corrupción ocurridos en la décadas de Fujimori.
En nuestro país hemos tenidos 3 gobiernos presididos por hijos de presidentes. El uno de Antonio Flores Jijón, hijo del general Juan José Flores, quien mal gobernó varios años a la nación. Otro fue Galo Plaza Lasso, hijo del general Leonidas  Plaza Gutiérrez. Un tercer caso fue Carlos Julio Arosemena Monroy, hijo de Carlos Julio Arosemena Tola. En los 3 casos las campañas electorales no giraron alrededor  de errores de sus padres y gobernaron con variadas suertes.

El calentamiento global

Aunque seamos un país pequeño, territorialmente hablando, debemos aceptar que somos de los primeros en lo que a calentamiento global respecta.  ¡Qué forma de hacer calor en las tardes!  Da la impresión de que con unos cuantos grados más tendremos “sesos a la plancha”...y así, difícilmente asoman las ideas.
La tarde que hubo un partido de fútbol en Guayaquil me propuse seguir el movimiento de las nubes. Estas asomaron con su pesada carga de agua en dirección oeste-este. Llovió y pude ver el “vapor” que salía  de las calles. Escuché a más de uno decir “prefiero este chubasco” antes que el calor que evapora las ideas.
Y ese es el punto. ¿Qué hacer para combatir el calor? Muchos negocios que antes tenían el aire acondicionado a todo vapor, ahora han reducido para ahorrar el consumo de luz que se refleja en las planillas.
Muchas familias han optado  por inflar  sus “piscinas portátiles” y llenarlas de agua para que chicos y grandes disfruten de un fin de semana fresco y barato. Saben que deben pagar un poco más por el H2O, pero  al día siguiente sirve esa agua para lavar aceras  y calles y  mejorar el aspecto a la barriada.
El panorama no es  nada agradable. Por meternos a querer ser nuevos ricos, nos endeudamos con medio mundo, y ahora  viene la parte dura, y es la de ahora ser “paganinis”...