Opinión
Columnas: La educación sexual y el amor
Ante todo, soy médico, comunicador social, exprofesor de secundaria y de universidades, creyente, educado por los padres salesianos y jesuitas, miembro de la Sociedad Ecuatoriana de Sexología.
Ante todo, soy médico, comunicador social, exprofesor de secundaria y de universidades, creyente, educado por los padres salesianos y jesuitas, miembro de la Sociedad Ecuatoriana de Sexología.
Sobre este tema, leía que grupos profamilia marcharon en algunas ciudades del país para exigir, entre otros pedidos, que se tome en cuenta a los padres de familia en temas de educación sexual en los adolescentes, siempre y cuando los padres tengan claro lo que es la educación sexual y su importancia para que los adolescentes entiendan de las consecuencias que puede tener una sexualidad sin educación, recordando siempre que el adolescente es un ser humano en formación al cual hay que enseñarle los pro y los contra de la sexualidad sin dogma ni fanatismo, y evitemos situaciones riesgosas y de consecuencias funestas para nuestra juventud como son los embarazos precoces (la mayoría no deseados) que terminan en desamor.
Hay que enseñarles las enfermedades de transmisión sexual como el sida o el papiloma humano que puede terminar en cáncer y para el cual hay vacuna; el herpes genital, que es incurable, etc.
Se debería educar a los padres sobre la sexualidad para que orienten a sus hijos, porque son los guías naturales en la sexualidad y el amor.
El sexo no debe ser dirigido por los instintos, como ocurre con los animales, sino por la inteligencia, el amor, la cultura, y sus distintas pautas sociales.