Columnas: Solidaridad periodística

El secuestro del que han sido objeto tres miembros de la prensa ecuatoriana, pertenecientes todos ellos a diario El Comercio de Quito, demuestra hasta la saciedad que los narcotraficantes, colombianos terroristas de las FARC, están empeñados en quitarle al Ecuador el calificativo bien ganado que tiene de ser un país que ama, defiende y vive en paz.

Razón tuvo Francisco Huerta Montalvo cuando en un análisis político que hiciera con relación al problema de tráfico de droga vinculado con las FARC, expresara que el Ecuador es una “narcodemocracia”. 50 y más años dura la acción narcotraficante de las FARC en Colombia.

El presidente Santos, a quien se le confirió el Premio Nobel de la Paz, firmó acuerdos de paz con las FARC; pero estas fuerzas dizque revolucionarias no la aceptaron en su totalidad y, como consecuencia de ello se resistieron a entregar las armas e invadieron la parte sur de su país, o sea la parte norte del Ecuador.

Se afincaron allí a vista y paciencia del gobierno de Rafael Correa, que calificó a los terroristas como “insurgentes” para congraciarse con ellos...

Todo el Ecuador sabía lo que se venía, menos Correa, su gobierno y la SENAIN. Los periodistas que soportan estoicamente este secuestro cuentan con el respaldo total del pueblo ecuatoriano que reconoce que la prensa cumple un papel preponderante en la vida de una sociedad.

Esperamos que sean puestos en libertad lo más pronto posible...(BLC)