Editorial: ¿Sistema obsoleto o una mafia?
Los quiteños pagan sus pasajes cuando ingresan al Trole y a la Ecovía. Los cajeros agarran las monedas y hacen torres con los centavitos y dolaritos. Hasta ahí todo bien. Pero entonces ocurre que al momento de entregar ese dinero a los recaudadores, no se cuenta sino que se pesa. Un sistema caduco y obsoleto que ahora le pasa factura a la Empresa de Pasajeros de Quito y, por supuesto, a los ciudadanos. Más de 100 mil dólares en faltantes reportó la Contraloría.
¿Qué pasó con todo ese billete? Quién sabe. Lo que sí palpa la gente es el estado de los buses, el desgaste de las paradas y también el limitado servicio. ¿Habrá una “mafia” detrás de esto, como dijo una concejala, o simplemente la capital necesita evolucionar y adaptarse a sistemas tecnológicos?