Las contradicciones sobre la eliminación del uso obligatorio de la mascarilla dejaron en evidencia que entre el Gobierno Central y el Municipio de Quito hay un teléfono descompuesto. No es un juego de niños. Es una lamentable realidad que expone la falta de comunicación de las autoridades para la toma de importantes decisiones para el país. Los que pagan estos errores, por supuesto, son los ciudadanos. ¿Más dudas? Sí. Que en la capital sí se debe usar tapabocas, luego que no. Pasaron más de 12 horas para que la Alcaldía anunciara que sí acoge la disposición del COE Nacional. ¿Pelea de poderes? Quién sabe. Pero es primordial que arreglen esa conexión fallida antes de que la situación empeore.

¿Hay falta de comunicación en las autoridades?

“Sí, debieron estar de acuerdo el Municipio y el Gobierno. Hoy los ciudadanos salimos sin saber quién tenía la razón y eso genera malestar”.

“Es evidente y eso provocó que las personas se confundieran. A mí no me importó lo que dijo el Municipio. Yo ya me cansé de ponerme la mascarilla”.