Editorial: Favorables cambios en la política exterior

Durante el régimen pasado, que duró toda una década, nuestro país permaneció virtualmente encerrado en sí mismo, aislado de importantes organismos internacionales por la sospecha de quienes ostentaban el poder de que acercarse a ellos significaba poner en peligro la soberanía nacional...

De esta manera perdimos valiosas oportunidades de establecer importantes relaciones comerciales que favorecieron a la economía pública y privada que requieren, sin comprometer derechos, de un crecimiento en un mundo en donde el tiempo y el espacio, venciendo distancias en procesos perentorios, parecen haber sido dominados por una sorprendente tecnología de punta.

Con la nominación de nuevos funcionarios encargados del manejo y programación de nuestras finanzas se ha dado, indudablemente, un giro importante a la estrategia económica, lo cual se demuestra con la intención del gobierno de buscar la incorporación a la Alianza del Pacífico.

Además, la visita al Ecuador de una importante misión empresarial norteamericana permite sacar conclusiones optimistas en cuanto al futuro positivo del crecimiento de nuestra economía que por tantos años, insistimos, permaneció autosecuestrada, por la errada política correísta.